El hombre intentó evitar una pelea y recibió el disparo que lo tiene en estado crítico.
La noche de fiesta se tornó en pesadilla en un parqueadero ubicado sobre la Troncal del Carine a la altura de Gaira, uno de los epicentros de la vida nocturna en la Troncal del Caribe, cuando el bullicio de la música y la alegría se apagaron de golpe con el sonido seco de un disparo.
Yubran Andrade, un joven que había salido a compartir con amigos, quedó tendido en el suelo, herido de gravedad por una bala en la cabeza en medio de una riña que ni siquiera era la suya.
Eran casi las cuatro de la madrugada cuando, según testigos, Andrade intentó intervenir en un altercado entre su amigo y otro hombre. Lo que comenzó como una confrontación verbal escaló rápidamente; Andrade, buscando calmar las aguas y evitar un conflicto mayor, decidió interponerse entre ambos.
Sin embargo, en un instante de caos y violencia, un disparo fue el fin de su intento de paz. El impacto en su cabeza lo dejó inconsciente y en un estado crítico, su vida pendiendo de un hilo.
El drama del traslado
La escena era desgarradora. Sus amigos y testigos, algunos aún en estado de shock, buscaron ayuda de inmediato. Andrade fue trasladado a la Clínica Los Nogales, donde los médicos lo atendieron de emergencia.
No obstante, sus heridas requieren de un tratamiento especializado que superaba las capacidades del centro médico. La única esperanza era trasladarlo a un hospital con los equipos necesarios, pero la familia se topó con un obstáculo casi insuperable: no lograban conseguir una ambulancia adecuada para el traslado.
“Cada minuto cuenta”, expresó un familiar, con la voz quebrada por la angustia. En medio de la desesperación, la familia de Yubran lanzó un llamado a la comunidad y a las autoridades, implorando apoyo para gestionar el traslado a un centro de mayor capacidad.
La situación es crítica, y el joven necesita de especialistas que puedan intervenir a tiempo y darle una oportunidad de recuperación.
Una cadena de esperanza
Mientras tanto, amigos y conocidos de Yubran Andrade, movidos por la impotencia y el dolor, han iniciado una cadena de oración en redes sociales.
La imagen del joven, sonriente y lleno de vida, circula con el mensaje de esperanza y el pedido urgente de ayuda. La comunidad, impactada por la tragedia, se une en mensajes de apoyo y alienta a las autoridades a dar una respuesta pronta. Sin embargo, la madrugada avanza y la angustia crece con cada minuto que pasa sin una ambulancia para el traslado.
Según expresaron personas que asistieron al lugar; no es la primera vez que una riña se desata en este punto de la Troncal del Caribe, y para muchos habitantes de la zona, la seguridad es una preocupación constante.
“Algo debe hacerse para prevenir estas tragedias. No podemos seguir viviendo con preocupación cada fin de semana por el desorden que ahí se general”, comenta uno de los vecinos del establecimiento.