Había renunciado a su trabajo como domiciliario de Coordinadora en Santa Marta para enlistarse en las filas del ejército de Ucrania como una mejor fuente de ingresos para él y su familia.
El militar fallecido fue identificado como Elvis Gudiño, un joven samario que quiso buscar un mejor futuro y mejorar su estabilidad económica y la de su familia.
Se conoció que Gudiño residía en el barrio Ciudad Equidad, de Santa Marta, y se desempeñaba como domiciliario de la empresa Coordinadora.
Sin embargo, en aras de mejorar su calidad de vida y la de su esposa, Mariana Hernández, y sus dos pequeñas, con quienes vivía en el barrio Ciudad Equidad, decidió emprender un viaje a Ucrania para luchar en la guerra contra la invasión rusa.
Elvis, también había sido soldado profesional en Colombia, por lo que contaba con los requisitos para combatir en las filas del ejército ucraniano.
La idea de irse a dicho país le pareció muy favorable, puesto que la remuneración o el pago por pelear en la guerra era alto y permitiría mejorar su calidad de vida.
Lamentablemente luego de dos meses de haber entrado a las filas, falleció en un bombardeo a manos del ejército ruso.
Su familia confirmó la pérdida de su ser querido a través de las redes sociales, mostrando en sus corazones un gran dolor por este desenlace trágico.
Su hermana Tatiana Gudiño compartió un video que había sido publicado en Facebook por Mariana Hernández, esposa del fallecido.
En la grabación se logra apreciar al joven vestido de camuflado en una trinchera del campo de batalla, con el nuevo testamento y fotos de su familia, celebrando al parecer lo que sería su aniversario tras cumplir 15 años de matrimonio.
«¿Por qué tú, hermanito de mi vida, por qué, padre, esta noticia? ¿Por qué decidiste irte para esa guerra absurda? ¿Por qué, hermanito, a quién le voy a decir a Dios te cuide siempre, manito? ¿Por qué me dijiste mentiras? Dijiste que vendrías de nuevo y que estarías con nosotros. Te amo y te amaré siempre, hermanito de mi vida”, dijo Tatiana.
A través de redes se logró observar que Gudiño era un padre ejemplar, muy amoroso y alegre. Disfrutaba compartir con su familia y, en especial, con sus dos niñas.
Hoy, la familia del colombiano se enfrenta a la difícil situación de repatriar el cuerpo, debido a las condiciones por las que atraviesa el lejano país y los altos costos de regresarlo a su tierra natal.