La presunta ladrona que había sido detenida tras ser sorprendida robando joyas en una compraventa del barrio 20 de Julio, se fugó de la URI de la Fiscalía sin que policías ni vigilantes notaran su ausencia. Las autoridades la buscan por toda la ciudad.

Un insólito hecho de descuido y vergüenza para las autoridades se registró este martes en Santa Marta. Una mujer que había sido capturada por intentar robar joyas en una compraventa logró escapar de la Unidad de Reacción Inmediata (URI) de la Fiscalía como si nada, sin que nadie lo advirtiera.

Todo comenzó cuando las cámaras de seguridad de una compraventa, ubicada en el barrio 20 de Julio, grabaron el momento en que la mujer intentaba llevarse varias joyas sin pagar. Los administradores del local alertaron de inmediato a la Policía, que acudió al sitio y la trasladó a la URI para su judicialización.

Sin embargo, la sorpresa llegó horas después: la mujer simplemente se fue. Nadie la vio salir, ningún uniformado se percató, y ni siquiera el vigilante del lugar notó la fuga. Cuando los agentes fueron a continuar con el procedimiento, ya no estaba.

El hecho ha generado indignación entre los comerciantes, quienes aseguraron que la misma mujer habría intentado hurtar en otros establecimientos en el pasado, incluso logrando su cometido en más de una ocasión.

Ahora, la fugitiva es buscada por toda la ciudad, mientras crece el malestar por la falta de control en un lugar donde, irónicamente, debería garantizarse la custodia de los detenidos.