El cobradiario quién además practicaba el Freestyle, fue asesinado junto a otra persona cerca al barrio Manzanares.

Un trágico hecho de sicariato en la calle 30 de Santa Marta dejó a dos jóvenes muertos y una comunidad conmocionada. Juan Arroyo y Keiner Orozco fueron asesinados a tiros mientras se desplazaban en una motocicleta, en un ataque perpetrado por desconocidos desde otro vehículo similar.

Lo que ha llamado la atención de familiares y amigos es que, tan solo un día antes de su muerte, Juan Arroyo había publicado un mensaje inquietante en sus redes sociales que parecía presagiar su destino: “Nacer y morir es ley de vida, ¿de qué es el preocupe?”. Además, hace un mes, también compartió una imagen con el texto: “Un día dejaré al mundo para seguir a Cristo”.

Una vida apasionada por el freestyle

Juan Arroyo, conocido entre su círculo cercano por su alegría y sociabilidad, tenía una pasión que lo destacaba: el freestyle. 

Con frecuencia compartía videos en sus redes sociales mostrando su habilidad en esta expresión artística urbana. Sin embargo, su principal sustento provenía de su trabajo como cobra diario.

El ataque ocurrió mientras Juan y Keiner se desplazaban en su motocicleta. Tras ser alcanzados por los disparos, ambos cayeron al suelo. Juan fue trasladado a una clínica cercana, donde lamentablemente falleció debido a la gravedad de sus heridas.

Dolor y desconcierto en su familia

La noticia de la muerte de Juan dejó devastada a su familia, quienes lo describen como un joven lleno de vida, alegre y social.

 «Era el alma de la casa, siempre tenía una sonrisa para todos», expresó uno de sus allegados.

Con este crimen, se eleva la preocupación por el aumento de hechos violentos que afectan a los jóvenes en Santa Marta, dejando un vacío irremediable en las familias y en la sociedad.