La Defensoría del Pueblo identificó fallas en inventarios, escasez de personal y problemas administrativos en farmacias Cafam, Audifarma y Logifarma, lo que ha generado graves retrasos en la entrega de medicamentos a pacientes crónicos.

La espera en las farmacias Cafam, Audifarma y Logifarma se ha convertido en una prueba de paciencia para cientos de pacientes en Santa Marta.

Durante recientes visitas de verificación, la Defensoría del Pueblo evidenció graves retrasos en la entrega de medicamentos, afectando especialmente a quienes padecen enfermedades crónicas como diabetes, hipertensión y afecciones respiratorias.

Los problemas van más allá de la falta de inventario. Se detectaron fallas administrativas, escasez de personal y largas filas de usuarios hacinados en busca de sus tratamientos. La Defensoría alertó sobre la urgencia de tomar medidas inmediatas para evitar que esta crisis empeore.

Si bien algunas farmacias se comprometieron a mejorar la atención, el problema persiste y requiere una solución estructural. La Defensoría pidió la intervención del Ministerio de Salud y la Superintendencia Nacional de Salud para garantizar la entrega oportuna de medicamentos y evaluar posibles sanciones a los establecimientos incumplidos.

Mientras las entidades buscan respuestas, los pacientes siguen enfrentando demoras que ponen en riesgo su salud. La Defensoría continuará inspeccionando las farmacias para verificar el cumplimiento de los compromisos adquiridos.