La mujer de 24 años, fue hallada sin vida en su cama. El presunto feminicida, su pareja, huyó en moto y cayó horas después en Puerto Colombia.

En redes sociales, Yolanda Estefany Arias Santos y Jairo Samuel Páez Muñoz eran una pareja feliz. Posaban sonrientes, se dedicaban mensajes de amor y compartían fotos que transmitían la imagen de una relación estable.

Él le escribía que la amaba y que quería estar siempre a su lado. Pero la realidad era otra. Detrás de esa fachada virtual, una discusión terminó en tragedia.

La madrugada del domingo, en una vivienda del barrio La Manga en Barranquilla, Yolanda fue hallada muerta por un hermano. Estaba tendida en su cama, con una almohada sobre el rostro y señales de estrangulamiento en el cuello. La llevaron de urgencia al Camino La Manga, pero los médicos confirmaron que había llegado sin vida.

Según las primeras investigaciones, el presunto responsable es su pareja, Jairo Samuel Páez Muñoz, quien habría aprovechado que la joven dormía para asfixiarla y luego escapar en una motocicleta. El hombre se desplazó hasta Puerto Colombia, donde fue ubicado horas más tarde en el sector del Castillo de Salgar. La Policía lo capturó sin resistencia y lo dejó a disposición de la Fiscalía.

La escena del crimen dejó destrozada a la familia Arias, que en cuestión de horas pasó de la calma de un domingo a vivir el horror de perder a una hija, hermana y sobrina en manos de quien se suponía debía cuidarla. La comunidad del barrio también quedó conmocionada: nadie entendía cómo el mismo hombre que presumía a su pareja en redes con palabras de cariño terminó siendo señalado de acabar con su vida.

La Sijín de la Policía se encargó de las diligencias judiciales y el cuerpo de Yolanda fue trasladado a Medicina Legal, donde se confirmó que la causa de muerte fue asfixia mecánica. La Fiscalía prepara el proceso contra Páez Muñoz bajo el cargo de feminicidio.

El caso desató indignación en Barranquilla y sumó una nueva víctima a la alarmante cifra de mujeres asesinadas por violencia de género en el país. Vecinos, familiares y colectivos de mujeres exigen que no quede en la impunidad y que la justicia actúe con celeridad.

Lea aquí: Mujer sufrió un infarto y murió esperando una ambulancia que la trasladara a clínica

De los abrazos públicos y las promesas de amor en redes sociales, la historia de Yolanda terminó convertida en un ejemplo doloroso de cómo la violencia puede esconderse detrás de las apariencias, y cómo las palabras de amor se transformaron en un silencio irreversible.