La joven de 20 años al servicio de la Policía Metropolitana de Cartagena, fue hallada sin vida en su apartamento en el barrio España. Su familia y compañeros esperan respuestas sobre las causas de su muerte, mientras reciben acompañamiento psicológico.
La Policía Metropolitana de Cartagena investiga la inesperada y enigmática muerte de Yirlene Julieth Mendoza Jiménez, una patrullera samaria de 20 años que fue encontrada sin vida en su residencia, ubicada en el barrio España de la capital de Bolívar.
La joven llevaba un año trabajando para la institución y estaba adscrita a la Estación del Centro Histórico, donde cumplía funciones de patrullaje y control en el casco antiguo de la ciudad.
De acuerdo con información preliminar, el hallazgo del cuerpo fue realizado por vecinos cerca de las 9:00 p.m., quienes alertaron a las autoridades tras notar la ausencia de movimientos en el apartamento de la joven, el cual compartía con su mascota, una pequeña perra.
Mendoza fue trasladada de inmediato a la sala de urgencias del Hospital Universitario del Caribe; sin embargo, los médicos confirmaron que llegó sin signos vitales.
El cuerpo de la joven fue ingresado en la morgue de Medicina Legal para realizar las pruebas necesarias que permitan esclarecer las causas exactas de su muerte.
Sus familiares, visiblemente consternados, se desplazaron hasta Cartagena para agilizar los trámites necesarios y trasladar el cuerpo de regreso a Santa Marta, su tierra natal, donde será despedida.
La muerte de Mendoza Jiménez ha generado una profunda tristeza entre sus compañeros de la Metropolitana y la comunidad samaria, que recuerdan a la joven como una persona comprometida y de gran vocación por el servicio.
En tanto, un equipo interdisciplinario de la Policía, integrado por psicólogos, está brindando apoyo emocional a su familia.
La noticia ha resonado en redes sociales, donde los familiares de Mendoza han expresado su desconsuelo. “Diosito, por qué tú, mi princesa, mi muñequita pequeñita de la familia. Nos dejas un vacío grande en el alma; aún no me lo creo”, escribió uno de sus allegados.
La Policía Metropolitana de Cartagena, mientras tanto, se encuentra a la espera de los resultados de las investigaciones y, hasta el momento, no ha dado declaraciones oficiales sobre las posibles causas de su fallecimiento.
Este trágico suceso deja en incertidumbre a la comunidad y a los compañeros de la patrullera, quienes esperan una pronta respuesta que permita dar claridad a este lamentable desenlace.
