El gobernador criticó la designación de Pablo Vera y como respuesta el rector electo fue invitado a sostener sus acusaciones en una Asamblea ante la comunidad universitaria.
La designación de Pablo Vera Salazar como rector reelecto de la Universidad del Magdalena generó un enfrentamiento directo con el gobernador Rafael Martínez, quien calificó su candidatura como “ilegal y fraudulenta”.
Martínez afirmó que “la elección de Vera carece de garantías para la comunidad universitaria”, y alegó que hubo presiones sobre estudiantes y docentes para favorecer al rector reelecto.
Según el gobernador, “bajo su dirección, la universidad ha intentado borrar el legado de Carlos Caicedo, un proceso que transformó la institución en beneficio de los magdalenenses”.
La respuesta de Pablo Vera
Pablo Vera en sus primeras declaraciones como rector electo defendió la legitimidad de su reelección y reafirmó su compromiso con la autonomía universitaria.
“La Universidad del Magdalena no es ni será una extensión de intereses políticos. Mi responsabilidad es con la comunidad académica, no con Fuerza Ciudadana ni con ninguna otra organización política”, declaró el rector, y agregó que su administración se enfoca en avances en infraestructura, investigación y calidad educativa.
También criticó la falta de apoyo financiero de la Gobernación: “Es irónico que las alcaldías municipales hayan respaldado más a la universidad que el propio gobierno departamental”.
El gobernador Martínez pide que se respete legado de Caicedo
A través de una carta pública, Martínez defendió el proceso de transformación de la Universidad del Magdalena iniciado hace 17 años, señalando que “este proyecto permitió la creación de nuevas facultades y mayor desarrollo profesional para estudiantes y egresados”.
El gobernador cuestionó lo que considera una manipulación de los procesos universitarios para perpetuar liderazgos, y mencionó reformas recientes: “Los cambios a los estatutos en diciembre de 2023 fueron un intento de asegurar el control de la universidad en manos de unos pocos”.
Además, expresó su preocupación por una supuesta falta de libertad de expresión en la universidad: “He recibido denuncias sobre contratistas de nóminas paralelas que respaldaron la reelección de Vera. ¿Qué clase de proceso democrático es este cuando un 38% de los estudiantes ni siquiera participó?”, cuestionó Martínez, poniendo en duda la transparencia del proceso electoral universitario.
Finalmente, Pablo Vera lamentó la ausencia de Martínez en el Consejo Superior y denunció que el gobernador recurre a “injurias y calumnias” en lugar de presentar sus opiniones en espacios institucionales.
“Defenderemos el buen nombre de la universidad. La democracia universitaria no puede ser vulnerada por intereses externos”, aseguró el rector.
Vera insistió en que su elección fue legítima y que las acusaciones de Martínez buscan empañar los resultados de su administración. “Cuando uno pierde, tiene que tener gallardía para reconocer los resultados”, afirmó.
En respuesta a insinuaciones sobre sus estudios de posgrado, Vera declaró: “Mi maestría fue financiada con recursos propios. Yo le debo mi vida a mi madre y mi compromiso es con los estudiantes y la comunidad que me ha respaldado desde hace años”.