El adolescente al ver que su madre era agredida, decidió tomar un cuchillo y defenderla, causando un desenlace trágico que ahora lo tiene privado de la libertad.
Un joven de 16 años, cansado de presenciar el maltrato de su madre a manos de su pareja, atacó a su padrastro en un momento de furia.
El trágico suceso ocurrió en el barrio Pescaíto de Santa Marta, en medio de una noche de celebración que terminó en tragedia.
Así sucedieron los hechos
Lo que debía ser una fiesta familiar se convirtió en el último capítulo de una historia marcada por la violencia.
En medio de una fiesta, los gritos rompieron el ambiente de aparente armonía cuando Fernando Osorio, de 28 años, comenzó a agredir a su pareja. Entre los presentes estaba su hijastro, un adolescente de 16 años que, según sus propias palabras, ya no soportaba ver cómo su madre sufría y lloraba a causa de los golpes.
“Hace mucho tiempo que veo cómo la golpea y la hace llorar, no podía soportarlo más”, declaró el joven ante las autoridades tras ser detenido por el homicidio de su padrastro.
Este incidente no fue aislado; según su relato, era solo uno de los muchos episodios de violencia que había presenciado.
Fernando Osorio, quien tenía antecedentes de violencia a servidor público, mantenía una relación tensa con el menor, pues cada vez que el hombre alzaba la voz o la mano, el joven intentaba defender a su madre.
Sin embargo, este domingo 27 de octubre, la situación escaló a un nivel trágico. En medio de la fiesta, Osorio comenzó nuevamente a insultar y golpear a su pareja. Fue en ese instante que el adolescente, cegado por la ira y el deseo de protegerla, tomó un cuchillo y se abalanzó contra su padrastro, propinándole una herida fatal en el pecho.
La escena fue caótica. Mientras algunos familiares intentaban separar a los dos, otros llamaron a la Policía. Osorio fue trasladado de inmediato a un centro asistencial, pero los esfuerzos de los médicos fueron en vano. La herida en el pecho había sido letal y minutos después confirmaron su muerte.
La Policía arrestó al joven en el lugar de los hechos. En sus declaraciones, el menor confesó que la agresión era constante y que su madre parecía seguir con Osorio por miedo.
“No soportaba verlo golpear a mi mamá”, repetía, con voz apagada, mientras los oficiales tomaban nota de su relato.
Este suceso deja a la comunidad de Santa Marta conmocionada, ya que es el segundo incidente de violencia fatal entre padrastro e hijastro en menos de un mes. En un caso anterior, otro joven perdió la vida a manos de la pareja de su madre en un acto similar de agresión.
El adolescente, ahora detenido, deberá enfrentar cargos por el homicidio de su padrastro. Sin embargo, sus palabras resuenan como un grito desesperado por poner fin a la violencia que había destruido su hogar.
