El robo de motocicletas en Santa Marta se ha disparado en 2025. En muchos casos, los delincuentes ingresan a las terrazas de las viviendas y, con llaves maestras, se llevan los vehículos sin dejar rastro.

En horas de la madrugada, mientras la mayoría de los habitantes del barrio Simón Bolívar descansaba, dos figuras vestidas de rojo irrumpieron en una calle solitaria. No hicieron ruido. No mostraron nervios. Solo actuaron.

Una cámara de seguridad, captó cada movimiento: cómo llegaron, cómo forzaron la cerradura con una llave maestra y cómo desaparecieron en solo 20 segundos con la motocicleta que estaba estacionada frente a una vivienda.

El video, que ya circula en redes sociales, ha generado indignación entre los samarios. No solo por la audacia de los delincuentes, sino porque se trata de una escena que se repite cada vez con más frecuencia en distintos barrios de la ciudad.

En lo que va del 2025, el robo de motos se ha disparado y muchas veces los ladrones ni siquiera esperan a que los vehículos estén en la calle: entran a las casas, e ingresan a las terrazas, y se los llevan como si nada.

Los vecinos del sector no ocultan su preocupación. Algunos aseguran que es la tercera vez que ocurre un hecho similar en menos de un mes. “Ya ni siquiera podemos dormir tranquilos. Nos sentimos desprotegidos”, comenta una residente que pidió no ser identificada.

La Policía Metropolitana de Santa Marta confirmó que ya se encuentra analizando las grabaciones y tomando declaraciones de los residentes para tratar de identificar a los responsables. Sin embargo, para muchos ciudadanos, las acciones llegan tarde. Piden más vigilancia, patrullajes constantes y estrategias de inteligencia que permitan frenar una ola de hurtos que parece no tener freno.

Los ladrones siguen moviéndose con la noche como aliada, sabiendo que, por ahora, el riesgo de ser atrapados sigue siendo bajo.