Con casco en mano y sin miedo, una mujer defendió a su pareja de una golpiza y se ganó el respeto del barrio 11 de Noviembre.
En el barrio 11 de Noviembre, donde las peleas son comunes pero pocas veces llegan a trascender, una mujer se convirtió en el centro de todas las miradas tras salvar a su esposo de una golpiza que estaba a punto de dejarle secuelas.
La tarde del incidente, un hombre se presentó en el negocio del comerciante con el objetivo de solucionar, a su manera, unas diferencias personales.
Las discusiones iniciales escalaron rápidamente hasta llegar a los golpes. El comerciante, intentó defenderse, pero pronto se vio superado por su agresor. Mientras la pelea tomaba un giro desfavorable para él, su esposa salió al rescate.
Sin pensarlo, la mujer se abalanzó sobre el hombre con tal determinación que logró que soltase a su esposo, obligándolo a retroceder por un momento. En ese breve lapso, el comerciante se liberó y, recuperando fuerzas, intentó contraatacar. Sin embargo, el hombre aprovechó la oportunidad para darle una nueva golpiza, la cual también afectó los objetos del negocio, que cayeron al suelo durante el tumulto.
Pero la intervención de la mujer no terminó ahí. Armándose con un casco, nuevamente se lanzó a defender a su pareja, dándole un golpe certero que hizo retroceder al agresor. Esta vez, el hombre, más intimidado por la valentía de la mujer que por el propio comerciante, decidió alejarse, a pesar de que este seguía intentando retomar la pelea.
Los vecinos, testigos de la escena, no dudaron en aplaudir la valentía de la mujer. Las causas del conflicto quedaron en un segundo plano, pues lo que realmente importó fue el coraje con el que ella se enfrentó al peligro. Mientras algunos bromeaban diciendo que necesitaban una mujer así en sus hogares, otros simplemente la admiraron por su valentía.
