A 17 días del brutal asesinato de Milanis Ester Almendrales, su hija Yairé Carval rompe el silencio y señala como principal sospechoso al compañero sentimental de su madre. La familia exige justicia y prepara una marcha para que la muerte de la mujer, conocida como ‘Patricia Teherán’ en Plato, no quede impune.

Han pasado 17 días desde que Milanis Ester Almendrales Medina fue hallada sin vida en una trocha del municipio de Guarne, Antioquia. Pero para su hija, Yairé Carval, cada día pesa como una eternidad. Aún no ha logrado asimilar el vacío que dejó su madre, más conocida en Plato, Magdalena, como “Patricia Teherán” por su carisma, alegría y amor por la música.

Lo que para muchos sigue siendo un misterio, para Yairé es una certeza dolorosa. “Él la mató, mi corazón de hija me lo dice. No voy a descansar hasta que se sepa la verdad”, declaró al portal Entérate Plato Noticias sin dudar, entre el dolor y la rabia. Se refiere a Jhon Jairo Reyes Miranda, el hombre con quien su madre mantenía una relación desde hacía apenas tres meses en Antioquia.

Milanis había salido de Plato buscando mejores oportunidades. Consiguió empleo como trabajadora doméstica y, en ese nuevo entorno, conoció a Jhon Jairo. Lo que comenzó como una ilusión se transformó en tragedia.

La noche del domingo 13 de julio, la pareja fue vista en una discoteca. Según la versión entregada por el propio Jhon Jairo a las autoridades, discutieron fuertemente, él se retiró del lugar y Milanis se quedó. Dos días después, recién el martes, el hombre reportó su desaparición. El cuerpo fue encontrado después en una zona boscosa de Guarne, con signos de haber sido agredida brutalmente con objetos contundentes.

Sospechas y contradicciones

La hija y la familia no le creen. Sospechan que la discusión no fue el final, sino el inicio del horror. La tardanza en reportar la desaparición y los antecedentes de violencia que supieron luego por vecinos del municipio de Tenerife, de donde es oriundo el hombre, aumentan las dudas.

“Los hijos fueron hasta allá y la gente decía que él tenía problemas por golpear a una ex pareja. ¿Cómo vamos a confiar en su palabra?”, dice la hija.

Aunque Jhon Jairo se presentó voluntariamente ante la Sijín, su testimonio no ha sido suficiente para disipar las sospechas.

Yairé insiste: “Puede que no haya actuado solo. Creo que alguien más lo ayudó. No puedo quedarme callada mientras mi mamá no tiene voz para defenderse”.

Justicia para Patricia

En Plato, la noticia fue un golpe seco. Milanis, alegre, trabajadora y fiestera, era una figura querida. “Era de las que bailaban hasta el final en cualquier fiesta, pero también madrugaba a ganarse el pan con las uñas”, recuerda una vecina.

La indignación ha crecido tanto como el dolor. Por eso la familia ha decidido convocar una marcha. “Queremos que el caso no quede archivado como uno más. Que la muerte de mi mamá no sea solo una estadística. Queremos justicia”, reitera Yairé.

Las autoridades continúan con la investigación, pero aún no hay capturas ni imputaciones. Mientras tanto, una familia se desmorona en medio del duelo, el miedo y la incertidumbre. Y una hija se aferra a su instinto y a la memoria de su madre para exigir lo que considera justo.

“El dolor no se va, pero al menos quiero que el responsable pague. No podemos dejar que la vida de una mujer buena y trabajadora se pierda así, sin más”.