La menor fue encontrada con varios impactos de bala al borde de la vía Juan Mina – Tubará. Las autoridades no descartan que se trate de un ajuste de cuentas por un conflicto personal.

El cuerpo sin vida de Beckerys Ospino Sanz, una adolescente de apenas 14 años, fue hallado a un costado de la carretera que conecta a Juan Mina con Tubará, exactamente en el kilómetro 4, muy cerca del kartódromo. Su muerte ha causado conmoción en la comunidad del municipio de Soledad, donde residía.

Beckerys fue identificada horas después del hallazgo. Su cuerpo tenía múltiples impactos de bala en distintas partes, lo que indica que fue víctima de un ataque violento. El informe preliminar de los peritos forenses señala que la adolescente no fue asesinada en el lugar donde fue encontrada, sino que fue atacada en otro sitio y posteriormente arrojada a la vía.

Una de las versiones que manejan los investigadores es que la joven habría sido lanzada desde un vehículo en movimiento. Aunque esa hipótesis aún está en verificación, será determinante para establecer cómo ocurrieron los hechos y quiénes están detrás de este atroz crimen.

¿Conflicto personal o crimen premeditado?

Las autoridades han sido cautelosas al entregar detalles sobre las líneas de investigación. Sin embargo, no descartan que el asesinato esté relacionado con un conflicto de carácter personal. «Todas las hipótesis están abiertas, y estamos trabajando con unidades de inteligencia e investigación criminal para esclarecer este caso», declaró una fuente cercana al caso.

Lo que sí parece claro es que Beckerys fue víctima de un crimen con sevicia. Su cuerpo fue dejado en la vía como si su vida no tuviera valor, en un acto que para muchos refleja el nivel de violencia al que están expuestos los menores en algunos entornos vulnerables del país.

“Era una peladita alegre, siempre andaba en el barrio. No sabemos qué pudo pasar, esto es muy triste”, dijo entre lágrimas una vecina cercana a la familia.

Hasta el momento, no se han reportado capturas por el hecho, pero la Policía y la Fiscalía ya adelantan la recolección de pruebas y testimonios. Las cámaras de seguridad del sector y el entorno de la víctima serán claves para intentar reconstruir sus últimos movimientos y dar con los responsables.