La administración de Maduro bloqueó al menos 70 sitios de internet en 2022. La mayoría eran portales de noticias independientes, según un informe.
Nicolás Maduro, presidente de Venezuela, ha dicho que buscará regular el uso de Instagram y TikTok en la nación sudamericana. Señaló que estas plataformas son “multiplicadores del odio y el fascismo”. Las redes sociales fueron utilizadas para denunciar supuestas irregularidades en la más reciente contienda electoral. Sirvieron para visibilizar los enfrentamientos entre militares y ciudadanos en medio de las protestas.
El mandatario dijo en un acto televisado que los servicios de Meta y ByteDance buscan «dividir a los venezolanos y crear fanáticos fascistas”. Indicó que estos espacios de interacción social han “infectado de manera descarada” a sectores clave de la sociedad con discursos de odio.
Maduro ha señalado que Instagram y TikTok fueron utilizados para confabular un ataque en contra del sistema informático del Consejo Nacional Electoral (CNE). Agrega que la supuesta estrategia buscaba debilitar y dividir a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) para que la posición pudiera avanzar en sus planes violentos. “Les puedo decir a los que dirigen este golpe de Estado ciber fascista criminal, desde el imperialismo norteamericano, que la FANB está cohesionada, unida y en combate por la paz, la democracia, la constitución y en protección del pueblo”, asegura.
La etiqueta #venezuela ha sido utilizada en Instagram alrededor de 97 millones de veces en la última semana, de acuerdo con cálculos del sitio especializado MIT Sloan Management Review. El hashtag en la plataforma de origen chino registró cerca de 53,000 ocasiones de uso. Las publicaciones marcadas con el distintivo alcanzaron a más de 13 millones de personas.
El presidente recordó que en Venezuela no hay ningún tipo de mecanismo nacional que regule el uso de las redes sociales. Solicitó al Consejo de Defensa y al de Seguridad emitir una serie de recomendaciones para establecer una normativa al respecto. Los analistas intuyen que esta petición podría ser un paso significativo para censurar al menos a Instagram y TikTok en el futuro inmediato.
Maduro y su oposición a las redes sociales
El gobernante ha mostrado en diversas ocasiones su oposición a las redes sociales. Durante el acto de proclamación como presidente reelecto, declaró que era necesario “abrir un debate sobre el efecto permisivo de las redes sociales en la psiquis colectiva, en la educación de los niños, en la promoción de antivalores y en el daño del clima del país. Le pido a la Asamblea Nacional que abra un debate amplio e inclusivo para que Venezuela vaya a la vanguardia en lo que tiene que ver con el tema”.
El régimen chavista ha sido señalado de censurar a los medios de comunicación por más de dos décadas. La organización sin fines de lucro Espacio Público indica que en los últimos 20 años cerca de 408 centrales de información han tenido que cerrar sus operaciones en Venezuela. Acusan que el gobierno no garantiza el derecho a la libre expresión ni la seguridad adecuada para ejercer el periodismo. Maduro ha dicho que en el pasado los canales de televisión eran los agentes que atacaban a la revolución bolivariana. Afirma que ahora son las redes sociales “las que intentan deslegitimar su poder”.
Expertos temen que con la reelección de Maduro el limitado acceso a internet en el país sea todavía más precario. El índice de ‘Libertad en la Red 2023’, elaborado por la organización no gubernamental Freedom House, indica que Venezuela tiene 29 puntos de 100 posibles en lo que respecta al derecho a la información.
“Los venezolanos a menudo tienen dificultades para acceder a la web, experimentan dificultades para obtener información confiable debido a la desinformación progubernamental y a los bloqueos de los medios independientes”, advierte el informe.
La administración de Maduro bloqueó al menos 70 sitios de internet en 2022. La mayoría eran portales de noticias independientes. El gobierno no prohíbe el uso de ninguna red social, sin embargo, los analistas no descartan una eventual restricción.
