Los estragos que dejó aguacero de más de 12 horas en Santa Marta 

Compartir

Facebook
WhatsApp
Twitter
LinkedIn
Telegram

Prolongadas lluvias durante el primer fin de semana del año dejaron barrios anegados, viviendas destruidas y colapsaron el sistema de alcantarillado, afectando tanto a residentes como a turistas.

El año comenzó con un panorama inusual en Santa Marta, donde las intensas lluvias registradas durante el sábado 4 y domingo 5 de enero dejaron a la ciudad sumida en el caos. 

Prolongados aguaceros inundaron calles, colapsaron el sistema de alcantarillado y afectaron a miles de residentes y turistas, quienes se vieron obligados a cambiar sus planes de disfrutar playas y ríos por las adversas condiciones climáticas.

Un fin de semana bajo el agua

Las precipitaciones, que iniciaron con fuerza la noche del sábado, se extendieron durante todo el domingo, generando un panorama alarmante. 

Las calles de barrios como Gaira, Timayuí, Pescaitos, Líbano y Las Malvinas quedaron completamente cubiertas de agua, obligando a los residentes a «nadar» para desplazarse. 

En algunos sectores, la fuerza de la corriente arrastró vehículos, mientras que en otros, viviendas quedaron con el agua adentro.

«Fue un desastre total. El agua se metió en mi casa afectando muebles, nevera, colchones. Nos tocó pasar la noche en casa de un vecino porque temíamos que pudiera pasar lo peor «, relató Ana María Hernández, residente del barrio Las Malvinas.

Turismo afectado

A pesar del clima adverso, los turistas intentaron desafiar las condiciones y acudieron a balnearios como El Rodadero. Sin embargo, la persistencia de las lluvias y un inusual ascenso de la marea que inundó parte de la playa obligaron a muchos a regresar a sus alojamientos para evitar tragedias.

“Llegamos desde Bogotá para disfrutar del sol y el mar, pero nos encontramos con este diluvio. Aun así, tratamos de pasarla bien, pero no era seguro quedarse”, comentó Carolina Rojas, turista afectada por la situación.

Zonas críticas

El panorama más grave se vivió en sectores propensos a inundaciones o deslizamientos. En el barrio San Fernando, al menos tres viviendas colapsaron, mientras que el río Manzanares se desbordó, afectando a cientos de familias que viven en zonas aledañas. 

«Esto pasa siempre que llueve fuerte. Perdí todo lo que tenía en la sala y la cocina. Ahora nos toca limpiar y ver cómo seguimos adelante», expresó Luis Martínez, habitante de Colinas del Río, mientras retiraba lodo de su vivienda.

Las vías principales tampoco escaparon al impacto. La Troncal del Caribe, que conecta a Magdalena con La Guajira, registró crecientes súbitas en ríos como Piedra, Bonda y Gaira, generando interrupciones en la movilidad.

También hubo desplomes de vías de acceso a Taganga y El Rodadero. 

Alcaldía activa plan de emergencia

Ante la emergencia, la Alcaldía de Santa Marta activó un Puesto de Mando Unificado (PMU) para coordinar la atención a los damnificados. El alcalde, Carlos Pinedo Cuello, aseguró que se están realizando censos de daños y desplegando ayuda en los sectores más afectados.

“He dado instrucciones claras a mi equipo, a @atesa_esp, @essmar_esp, la Cruz Roja, Bomberos y Defensa Civil para reforzar las labores de atención. Seguimos realizando el censo de daños desde temprano con el apoyo de todo el equipo de la @SantaMartaDTCH. Agradezco el compromiso de los organismos de socorro e invito a la ciudadanía a mantenerse alerta y seguir las recomendaciones emitidas por la Alcaldía”, declaró el mandatario en su cuenta de X.

Causas del fenómeno

Según el portal especializado Iclima, estas lluvias son consecuencia de un sistema frontal combinado con un área de baja presión en el Caribe Occidental, así como una perturbación en niveles bajos de la atmósfera. Estas condiciones podrían mantenerse hasta el lunes, aumentando el riesgo de nuevas inundaciones.

Mientras tanto los samarios intentan recuperar la normalidad, las imágenes de calles convertidas en ríos, alcantarillas desbordadas y familias sacando lodo de sus hogares reflejan una vez más las falencias históricas en la infraestructura de la ciudad frente a eventos climáticos extremos.

“Hacen falta inversiones en mejorar el sistema de alcantarillado. Esto no es nuevo, cada vez que llueve fuerte vivimos lo mismo”, expresó indignado José Díaz, residente del barrio Pescaíto.

Por su parte, las autoridades hacen un llamado a la ciudadanía a mantenerse alerta ante las condiciones meteorológicas y a seguir las recomendaciones para evitar mayores afectaciones.