La familia Fernández aún no logra comprender cómo perdieron sus hogares en un abrir y cerrar de ojos. Aunque están agradecidos por haber sobrevivido milagrosamente, no pueden ocultar la tristeza que sienten al quedar sin nada.
En las primeras horas de la madrugada del pasado lunes, una tragedia golpeó al Barrio Corea de Santa Marta. Un incendio de grandes magnitudes arrasó con dos viviendas en la calle 33 con carrera 13, dejando a múltiples familias en la calle y generando pérdidas irreparables.
La familia Fernández fue una de las más afectadas por esta devastadora conflagración. Aún conmocionados, relatan cómo un simple descuido desencadenó el desastre.
Según su versión, todo comenzó con una vela encendida que cayó al suelo, iniciando un voraz fuego que se propagó rápidamente por el inmueble. Álvaro Fernández, residente del lugar, actuó con valentía al despertar en medio del humo y lograr salvar a su familia de una muerte segura. Sin embargo, la tragedia cobró la vida de dos de sus perros y lo dejó con quemaduras fuertes.
Las autoridades, junto con los voluntarios del Cuerpo de Bomberos de Santa Marta, se desplegaron en el lugar para controlar las llamas. Después de arduas horas de trabajo, lograron extinguir el incendio que amenazaba con propagarse a otras viviendas del sector.
El subintendente Freddy Mendivil, líder de la operación de rescate, destacó el desafío que enfrentaron los bomberos al combatir el fuego en una vivienda que también funcionaba como chivera y donde se almacenaba gasolina. La presencia de estos materiales inflamables complicó aún más la situación, pero el trabajo del equipo logró contener la emergencia.
Sin embargo, las pérdidas fueron significativas. dos familias se quedaron sin hogar, y las viviendas cercanas sufrieron algunmos daños. La solidaridad de la comunidad se hizo sentir cuando vecinos se unieron para ayudar en la evacuación de las familias afectadas.
Álvaro Fernández expresó su decepción por la atención recibida por parte de la ambulancia que llegó al lugar. Denunció la falta de insumos para tratar sus heridas y resaltó la importancia de la ayuda brindada por una vecina médica que pudo proporcionar la atención necesaria.
Actualmente, la familia Fernández y otras familias afectadas se encuentran en una situación desesperada. Solicitan la colaboración de la comunidad para reconstruir sus hogares y recuperar lo perdido.
