A través de una llamada lo sacaron de su casa para un supuesto negocio y al llegar al lugar no encontró a quien lo citó, pero si a una pareja de sicarios que le disparó hasta dejarlo muerto.
La violencia sigue cobrando vidas en Santa Marta. La noche del miércoles, Willington Borja, conocido en el barrio Ciudad Equidad como ‘Coco’, fue asesinado en lo que sus familiares describen como una trampa cuidadosamente tendida por alguien en quien confiaba.
Borja estaba en su casa cuando recibió una llamada de una persona conocida que lo convenció de salir con el engaño de un negocio.
Confiado, le dijo a su familia que volvería pronto y se dirigió hacia la parte alta del barrio Yucal, ubicado a poca distancia. Sin embargo, esa sería la última vez que lo verían con vida.
Al llegar al sitio acordado, no encontró a quien lo había citado. En su lugar, dos sicarios en motocicleta lo acorralaron en medio de una calle empinada y le dispararon en repetidas ocasiones hasta asegurarse de que muriera en el acto.
Su cuerpo quedó tendido en el suelo, rodeado por un charco de sangre, mientras el sonido de los disparos retumbaba en la noche.
La noticia de su muerte cayó como un golpe devastador para su familia y amigos, quienes entre lágrimas expresaron su dolor e indignación. Están convencidos de que lo engañaron con una falsa oportunidad, atrayéndolo a una emboscada mortal. Ahora, exigen justicia y respuestas.
Las autoridades han iniciado una investigación para esclarecer quién realizó la llamada que lo llevó a la muerte y si esta persona tuvo participación directa en el crimen.
También intentan determinar en qué tipo de actividad estaba involucrado Borja y cuál era el supuesto negocio que lo hizo salir de casa esa fatídica noche.
Este homicidio convirtió a Willington Borja en la segunda víctima de la violencia en Santa Marta en la misma jornada, reflejando la creciente inseguridad que azota estos días a la ciudad donde en tres días cinco personas han caído asesinadas. Sus seres queridos solo esperan que se haga justicia y que la verdad salga a la luz.
