Antes de saltar, realizó una llamada en la que, entre lágrimas, pedía perdón a su pareja por haberle fallado.

La tarde del domingo en Villavicencio quedó marcada por una escena que estremeció a la ciudad y se propagó rápidamente en redes sociales. Orlando Miguel Mercado Ortega, de 41 años, llegó en taxi hasta el puente peatonal que conecta los barrios Azotea y Galán. Con el celular en la mano, descendió del vehículo, escaló la malla de protección y, desde lo alto, inició una llamada que parecía una despedida.

La llamada que anticipó la tragedia

Testigos relataron que, entre lágrimas, Orlando expresó su arrepentimiento por un error que lo atormentaba. “No me perdono lo que te hice… no me perdono haberte fallado”, alcanzó a decir con la voz quebrada, en una súplica desesperada que fue escuchada por quienes lo rodeaban.

La tensión creció a medida que transeúntes intentaban persuadirlo. Algunos le rogaban que bajara, otros buscaban palabras de consuelo para convencerlo de que desistiera de la fatal decisión. Sin embargo, la angustia se transformó en silencio cuando, en cuestión de segundos, Orlando se levantó y se lanzó al vacío.

El hecho dejó atónitos a decenas de personas que presenciaron la escena. Varias de ellas grabaron el momento con sus celulares, imágenes que poco después circularon en redes sociales y generaron indignación y dolor.

“Fue algo muy fuerte, todos gritábamos que no lo hiciera, pero al final no pudimos detenerlo”, contó un joven que intentó acercarse para hablarle.