Una exagente de tránsito de Pereira enfrenta una grave enfermedad autoinmune, pero un hallazgo macabro en un cementerio ha hecho que sus allegados crean que podría estar siendo víctima de un maleficio.

Daniela Gaviria fue durante años una funcionaria reconocida en las calles de Pereira. Como agente de tránsito, se volvió popular en redes sociales tras la viralización de un video que mostraba su autoridad y carisma mientras dirigía vehículos. Hoy, su realidad es completamente distinta: postrada, con su salud deteriorada por una enfermedad agresiva, y en medio de un ambiente cargado de miedo, dolor y sospechas.

La joven fue diagnosticada con esclerosis sistémica progresiva, una enfermedad autoinmune que endurece la piel y puede comprometer órganos vitales. Desde entonces, su cuerpo ha ido cediendo de forma rápida y alarmante.

Pero para sus familiares, lo más desconcertante no es solo el diagnóstico, sino las circunstancias extrañas que rodean su caso.

En las últimas semanas, surgió un hecho que ha aumentado el temor de su familia: un clarividente muy conocido en Pereira denunció haber encontrado un entierro sospechoso en el Cementerio San Camilo. Según el vidente, el hallazgo incluía objetos relacionados con rituales de brujería: fotografías de Daniela, velas negras, restos extraños y figuras amarradas con hilos. “Esto fue hecho para dañarla”, dijo el hombre, asegurando que lo que encontró estaba dirigido directamente a ella.

Desde entonces, la familia de Daniela no ha dejado de pensar en que su sufrimiento podría no ser únicamente médico. “Nada explica cómo pasó todo tan rápido. Era una mujer fuerte, sana, y de repente se vino abajo”, contó una de sus tías. “Aquí hay algo más. Algo oscuro”.

Daniela ha recibido tratamientos intensivos, entre ellos un trasplante de médula ósea realizado en Cali en diciembre de 2024. Pero su evolución ha sido lenta y marcada por retrocesos. Pese a los esfuerzos médicos, su cuerpo sigue presentando señales de desgaste, y sus niveles de energía son mínimos. A cada recaída, aumenta la angustia.

En redes sociales, muchos de sus seguidores —que recuerdan su vitalidad y carisma— también han comenzado a hablar de posibles ataques espirituales. Algunos han ofrecido rezos, otros han sugerido limpiezas energéticas, y varios han compartido experiencias similares que atribuyen a “trabajos” de brujería.

La situación tiene a su familia devastada. Mientras médicos buscan nuevas alternativas para frenar la enfermedad, ellos también exploran caminos espirituales y acuden a iglesias y líderes religiosos. “Nos aferramos a lo que sea. Si esto es brujería, también necesitamos combatirlo con fe”, expresan.

Por ahora, Daniela sigue en tratamiento, luchando con lo poco que le queda de fuerza, mientras el miedo se mezcla con el dolor de una enfermedad que no solo ha golpeado su cuerpo, sino que ha dejado una pregunta sin respuesta: ¿es este un caso médico… o hay algo más detrás?