Un video de la Selección de Venezuela recibiendo un pasillo de honor previo al partido contra Colombia se volvió viral y terminó siendo símbolo de exceso de confianza. La eliminación dolió más porque, al final, el único que celebró fue Bolivia.

Lo que pintaba como una fiesta terminó en novela tragicómica para la Vinotinto. Horas antes de enfrentarse a Colombia en un partido clave, los jugadores venezolanos pasaron por un “pasillo de honor” como si ya tuvieran el tiquete al Mundial en el bolsillo. Directivos y exfiguras del fútbol criollo los aplaudieron, los felicitaron y casi les ponen la medalla de campeones… faltando el pequeño detalle de que todavía no habían jugado.

En redes sociales, el espectáculo fue bautizado como el “pasillo de la gloria”, aunque muchos hinchas prefirieron llamarlo el “pasillo de la sal”. Y es que, para varios, la celebración anticipada fue como sacar la champaña en el minuto cero. La confianza estaba tan alta que hasta los periodistas deportivos transmitieron la escena como si se tratara del momento histórico que rompería décadas de frustraciones.

Yo no había visto esta ridiculez…

¿Cómo le van a hacer un pasillo así a una selección y jugadores que no lograron nada?

Que show tan lamentable vale… luego fueron y se comieron SEIS DE LOCAL después de más de 20 años… pic.twitter.com/PwJldOuJ4J

— Klon Pérez (@klon_perez) September 12, 2025

Pero la realidad fue más cruel que un autogol en el último minuto. La Vinotinto no logró superar a Colombia, quedó eliminada y, de ñapa, la fiesta terminó alegrando a Bolivia, que ahora sigue soñando con el Mundial gracias al tropiezo venezolano.

El episodio quedará en la memoria colectiva no como el día de la épica clasificación, sino como la vez que se armó el pasillo equivocado. Una mezcla de optimismo desbordado, superstición y exceso de confianza que terminó en la peor de las bromas: Venezuela fuera del Mundial y Bolivia celebrando de rebote.

Porque en el fútbol, como en la vida, hay que celebrar… pero después del pitazo final.