Aunque fue trasladada a Barranquilla y estabilizada, su estado se complicó en los últimos días. Las autoridades continúan investigando las causas del incidente.
Este lunes, se confirmó el fallecimiento de una de las estudiantes del Colegio La Milagrosa en Santa Marta, quien resultó gravemente herida en un incendio durante la feria de ciencia y emprendimiento de la institución.
La adolescente Triana Isabel Pabón Díaz, de 17 años, estudiante de grado 11, sufrió quemaduras de tercer grado que obligaron a su traslado a una clínica especializada en Barranquilla, donde fue estabilizada inicialmente. Sin embargo, su condición se complicó en los últimos días, provocando su deceso.
La jornada que comenzó como una celebración de creatividad y esfuerzo en la feria de ciencia y emprendimiento del colegio, el pasado mes de septiembre, terminó en tragedia cuando un incendio en la cocina dejó a dos estudiantes con quemaduras graves. Las causas del accidente aún están siendo investigadas, pero las primeras versiones sugieren una fuga de gas o una estufa que fue manipulada incorrectamente, lo que desató el fuego.
La tragedia y el pronunciamiento de la institución
En su momento, el Colegio La Milagrosa emitió un comunicado firmado por su rectora, Eleein Paola Navarro González, expresando su profundo dolor por lo sucedido y su solidaridad con las familias afectadas.
«Hoy me dirijo a ustedes con una mezcla de sentimientos que humanamente son inevitables cuando se vive un momento de crisis como el que ya es de su conocimiento», señaló Navarro en el mensaje, lamentando lo ocurrido durante un evento que debía ser un reflejo del esfuerzo y talento de las estudiantes.
El incendio, que se originó en la cocina de la institución, provocó pánico entre los presentes, aunque la rápida actuación de los docentes evitó una tragedia mayor. La estudiante fallecida sufrió quemaduras en el cuello y brazo, mientras que la otra adolescente, de grado 10, presentó quemaduras de menor gravedad en la espalda y brazo.
Reacciones y apoyo de la comunidad
La comunidad educativa se ha mantenido unida desde el accidente, con múltiples muestras de apoyo a las estudiantes afectadas y a sus familias.
La rectora destacó en su momento la importancia de los simulacros de emergencia realizados en la institución, lo que permitió una rápida evacuación y la intervención oportuna de los brigadistas escolares.
«El orden y el manejo de las emociones de nuestros estudiantes fueron claves para brindarnos apoyo mutuo y atender a las personas afectadas», agregó Navarro, quien también agradeció la rápida respuesta de los padres de familia, que se hicieron presentes para colaborar en la evacuación.
A pesar de las medidas preventivas y la pronta respuesta, las autoridades continúan investigando las causas exactas del incendio para determinar responsabilidades y evitar que situaciones similares se repitan.
La institución se ha comprometido a revisar los protocolos de seguridad y tomar medidas correctivas para garantizar la protección de sus estudiantes en futuros eventos.
