La Guajira volvió a ser escenario del horror. En un video grabado por los propios verdugos quedó registrada la masacre de cuatro hombres en medio de una parranda en La Punta de los Remedios, Dibulla. Testigos señalan a alias ‘Naín’, miembro de las ACSN y uno de los criminales más buscados de la región.

La tarde de música y licor terminó en una escena de sangre y terror. Pasadas las 5:00 p. m. del domingo, seis hombres armados llegaron en una camioneta hasta una vivienda en La Punta de los Remedios, donde más de 20 personas compartían en una parranda. Los sicarios, vestidos de camuflado y con fusiles en mano, irrumpieron a tiros contra todos los presentes, apagando la fiesta en cuestión de segundos.

El ataque, que fue grabado en video por los mismos asesinos, muestra la manera en que los matones derribaron de las sillas a sus víctimas y luego los remataron en el piso con absoluta tranquilidad, antes de retirarse sin que nadie pudiera detenerlos. La crudeza de las imágenes estremeció incluso a las autoridades: cuerpos tendidos lado a lado, en medio de charcos de sangre, contrastando con los minutos previos en que las víctimas cantaban y bebían al son de la música a alto volumen.

Los cuatro hombres que perdieron la vida fueron identificados como Gamalier, Iván David, Joenne José y Ubencio, con edades entre 24 y 70 años. De ellos, solo Iván David registraba antecedentes judiciales por concierto para delinquir y fuga de presos.

De acuerdo con testigos, uno de los jefes de la masacre sería alias ‘Naín’, también conocido como ‘el Menor’, un temido cabecilla de las Autodefensas Conquistadoras de la Sierra Nevada (ACSN). El joven, por quien las autoridades han ofrecido hasta 100 millones de pesos de recompensa, había sido incluido meses atrás en la polémica mesa de diálogo entre ese grupo armado y el Gobierno, que terminó suspendida.

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La Defensoría del Pueblo había advertido hace un mes del riesgo extremo en Dibulla, Riohacha y San Juan del Cesar, por la confrontación entre las ACSN y el Clan del Golfo, que ya ha dejado homicidios, desplazamientos y reclutamiento de menores. Según Indepaz, esta es la masacre número 53 que se registra en Colombia en lo corrido del año.
Un equipo de la Dijín fue enviado a La Guajira para asumir la investigación, mientras las autoridades locales adelantan un consejo extraordinario de seguridad. Por ahora, lo único claro es que la parranda que debía terminar en alegría se convirtió en una pesadilla que revive el miedo en la región.