En la ciudad y el país en general ha sorprendido el hecho que tanto la niña como el adulto hayan salido en perfecto estado a pesar de permanecer tarde y noche en el mar en medio de la nada.

La desaparición de la niña estadounidense Mía Londoño de 9 años y su tío César Rojas en el mar de El Rodadero mantuvo en vilo al país durante horas. Sin embargo, lo que inicialmente parecía una tragedia inevitable tuvo un desenlace sorprendente: ambos fueron encontrados con vida, en perfectas condiciones físicas, desatando una ola de dudas y cuestionamientos en la opinión pública.

A pesar de haber permanecido más de doce horas a la deriva, sin hidratarse, dormir ni alimentarse, el adulto y la menor fueron hallados sanos y sin signos evidentes de desgaste físico o hipotermia.

Este hecho ha generado inquietudes entre expertos y ciudadanos que se preguntan cómo lograron sobrevivir sin mayores afectaciones.

El hallazgo que desató sospechas

El rescate fue protagonizado por Jorge Núñez, un pescador que, según su testimonio, los encontró flotando a unas cuatro millas del Morro de la Bahía.

“Dios me puso ahí, yo solo hice lo que cualquier otra persona habría hecho”, declaró Núñez. No obstante, para algunos expertos en rescate marítimo y primeros auxilios, la historia presenta inconsistencias.

El buzo profesional Alberto Ramírez sostiene que las condiciones climáticas fueron favorables y que el chaleco salvavidas ayudó a evitar una tragedia. Sin embargo, enfatiza que permanecer tanto tiempo en el agua suele traer consecuencias como deshidratación, hipotermia o calambres severos.

“Es inusual que una niña y un adulto resistan tantas horas sin signos de agotamiento extremo”, afirmó.

Igualmente considera que el hecho de que el accidente haya ocurrido en la tarde- noche no los expuso a temperaturas fuertes ni rayos solares. Esta circunstancia habría sido desvatadora para la vida de ambos.

No obstante, por su parte, el ingeniero industrial César Aguirre cuestiona la falta de signos visibles de deterioro en sus cuerpos.

“El agua salada, el oleaje y la exposición a la humedad constante suelen debilitar a las personas. Es extraño que, tras toda una noche en el mar, ambos aparecieran casi intactos”, indicó.

Las versiones y las dudas

Según el relato de César Rojas, una ola los derribó de la moto acuática y, al intentar socorrer a la niña, perdió de vista el vehículo.

Desde ese momento, se mantuvieron flotando y nadando en busca de tierra firme, sin lograrlo. “El chaleco fue fundamental, pero también el hecho de que Mía sabía nadar. Nos turnábamos para descansar flotando”, relató.

No obstante, algunas inconsistencias en cómo sucedieron los hechos han llevado a las autoridades a abrir una investigación sobre lo sucedido.

La Dirección General Marítima (Dimar) busca esclarecer las circunstancias en las que desaparecieron y evaluar si hubo imprudencia por parte del adulto o posibles fallas en la respuesta de los prestadores del servicio de alquiler de la moto acuática.

Investigaciones en curso

Las pesquisas de la Dimar también incluyen la revisión de los protocolos de seguridad del servicio de alquiler y la posible tardanza en reportar la desaparición. Se indaga si el aviso a las autoridades se realizó oportunamente o si hubo una demora significativa que prolongó innecesariamente el tiempo que ambos permanecieron en el agua.

Aun cuando expertos marítimos consideran que el rescate fue afortunado, las dudas persisten.

“Es un hecho que desafía la lógica. Parece sacado de un libro de Gabo”, concluyó el ingeniero Aguirre. “Sin desmeritar el valor de la historia, hay aspectos que necesitan explicaciones técnicas y respuestas claras”.

La familia de Mía Londoño celebra el milagroso reencuentro, agradeciendo a Dios y a quienes ayudaron en la búsqueda. Aún así, la incertidumbre sobre lo que realmente ocurrió en esas largas horas en alta mar sigue generando interrogantes entre la comunidad y las autoridades.

¿Realmente fue un milagro o hay detalles que aún no han salido a la luz? ¿Por qué el adulto mayor expuso su vida y la de la niña adentrándose a una zona de oleaje peligroso?