Los dos salieron rumbo a las festividades el sábado y no regresaron. Mientras sus familias claman por ayuda, crecen rumores de que estarían en Bogotá. La incertidumbre domina el caso.

En el corregimiento de RíoFrío, Magdalena, desde el pasado sábado, dos familias viven en zozobra por la desaparición de Jhoendry y Elizabeth, quienes salieron rumbo a Orihueca para disfrutar de las festividades del fin de semana. Desde entonces, no se sabe nada de ellas.

“Salieron juntas con la emoción de ir a las fiestas, pero no volvieron. No contestan el celular. No hay señales”, relata con desesperación un familiar que desde entonces no ha dejado de buscarlas.

Las denuncias fueron radicadas ante las autoridades, pero los resultados aún no llegan. Mientras tanto, la angustia crece. Las familias han recurrido a redes sociales, a carteles, a cadenas de WhatsApp. Cualquier medio es válido para intentar saber algo de su paradero.

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Algunas publicaciones aseguran que una de ellas habría sido vista en Bogotá, incluso supuestamente colándose en el sistema de transporte TransMilenio. Otros dudan de la desaparición y especulan con la posibilidad de una fuga voluntaria.

“No se dejen llevar por chismes. Aquí hay una familia destruida esperando noticias. No es momento para inventar cosas ni para juzgar”, dijo otro allegado visiblemente afectado.

En las redes, el caso se ha viralizado. Hay quienes comparten las fotos de las jóvenes con mensajes de solidaridad. Otros, en cambio, insinúan que “seguro se fueron por su cuenta”. Esa narrativa, lejos de ayudar, ha provocado más dolor en sus seres queridos.