Alicia Stone, oficial del Departamento de Policía de Nueva York, falleció en un hospital de Cali luego de someterse a una liposucción y un levantamiento de glúteos. Su esposo, también agente, cuestiona la atención médica y pide una autopsia independiente en Estados Unidos.

El caso de la detective Alicia Stone, de 40 años, ha desatado conmoción en Estados Unidos y Colombia. La funcionaria del Departamento de Policía de Nueva York (NYPD) murió en Cali, una semana después de someterse a un procedimiento estético en una clínica privada.

De acuerdo con los reportes iniciales, Stone fue encontrada inconsciente en la habitación de un hotel y trasladada a la Fundación Valle del Lili, donde los médicos confirmaron su fallecimiento. El informe preliminar señala que sufrió un paro cardíaco, aunque las causas exactas aún se investigan.

Su esposo, Michael Stone, también oficial del NYPD, denunció inconsistencias en la información entregada por la clínica. En entrevista con el Daily News, afirmó que la médica solo lo llamó para comunicarle la muerte sin ofrecer detalles precisos. «La doctora que me llamó desde Colombia solo me llamó y me dijo que mi esposa acababa de fallecer», señaló.

Michael se mostró sorprendido al enterarse de que su esposa estaba alojada en un hotel y no en una unidad de recuperación médica. “No tengo confianza en nada de lo que ha ocurrido en Colombia en este momento» advirtió el agente.

El NYPD confirmó el fallecimiento y expresó su pesar por la pérdida de una de sus detectives más respetadas. Según fuentes del cuerpo policial, se desplazó personal a Colombia para apoyar el proceso de investigación y coordinar el traslado del cuerpo a Nueva York.

Compañeros de Stone la describieron como una mujer disciplinada, perfeccionista y de alta integridad profesional, con 13 años de servicio en la Oficina de Asuntos Internos del NYPD. Las autoridades colombianas abrieron una investigación para esclarecer las circunstancias del deceso y revisar las condiciones en las que se realizó la cirugía estética.

Estudios médicos advierten sobre los riesgos de este tipo de procedimientos. Según el Aesthetic Surgery Journal (2017), los levantamientos de glúteos presentan una tasa de mortalidad de 1 por cada 3.448 pacientes, hasta 20 veces mayor que la de otras cirugías estéticas, lo que los convierte en una de las operaciones más peligrosas en el mundo.