La mayoría del concejo se negó a hacer un ejercicio de control a estos recursos que se destinarán en el desarrollo de estas festividades.
En el concejo de Santa Marta, se quedaron esperando al secretario de Cultura, Darío Linero, quien debía explicar cómo se invertirán los 7.200 millones de pesos destinados a la Fiesta del Mar, que se celebrará el próximo mes en la ciudad.
El funcionario se excusó por no presentarse, y en una nueva votación nominal, se determinó no volver a citarlo. Esto dejó el tema sin resolver, quedando únicamente la información del contrato otorgado a un privado para la organización de las festividades.
Solo cinco concejales apoyaron una nueva citación al secretario de Cultura, mientras que la mayoría, representada por 13 cabildantes, restó importancia al estudio de este presupuesto.
“Una falta de respeto con la ciudad”: Miguel Martínez
El coadministrador Miguel Martínez se mostró indignado por el desinterés que, según él, percibe en la corporación para ejercer un control eficiente de los recursos públicos.
«Es una falta de respeto con la ciudad que los concejales hayan hundido un debate en el que conoceríamos de dónde y cómo se van a gastar $7.200 millones para la Fiesta del Mar… ¿cuál es el miedo que tienen a decir en qué se van a gastar la plata?», cuestionó el concejal.
Martínez criticó la alta inversión en las festividades cuando en la ciudad hay muchas problemáticas por atender.
Aseguró que la Fiesta del Mar no deja más que «borrachos por montones a Santa Marta». «Hasta que no se solucione el rebosamiento de aguas de alcantarilla y la falta de cultura en Santa Marta, no se le puede invertir un peso en fiestas», agregó Martínez.
El concejal denominó una «jugadita» la acción de sus compañeros del concejo y lamentó que no se pudiera discutir este contrato, que carece de estudios y especificaciones claras sobre la inversión de los recursos.
«Hay un solo oferente escogido a dedo, por un término de 4 meses, y las fiestas solo duran 5 días. Desde ya se están gastando los recursos de los samarios», sentenció.
Defensa de la Fiesta del Mar
Por su parte, el concejal Juan David Vergel defendió la realización de la Fiesta del Mar, asegurando que potencia el turismo y, por ende, la economía local.
«Las fiestas son importantes para la economía. Los vendedores ambulantes de chicle, cerveza y demás se verán beneficiados durante la jornada. Más aún, cuando el alcalde se ha comprometido a hacer unas coloridas fiestas con grandes artistas», dijo el concejal de Fuerza Ciudadana.
Vergel también destacó que, al visitar a los vendedores en El Rodadero, todos mostraron una respuesta positiva respecto a las grandes expectativas que tienen con el aumento de sus ingresos.
«Sí a la Fiesta del Mar. Estas fiestas representan lo mejor de nuestra cultura samaria. Benefician enormemente al pueblo, desde nuestros vendedores ambulantes hasta el sector hotelero. ¡Estas fiestas son el corazón de nuestra cultura!», afirmó Vergel.
Apoyo del gremio hotelero
El representante del gremio hotelero, Omar García, también apoyó la organización de unas fiestas de alto nivel, considerando que permiten que la ciudad sea noticia y sea referenciada a nivel nacional e internacional.
«La Fiesta del Mar beneficia la imagen del destino, genera noticias positivas, y durante cuatro días se habla de la ciudad. Siendo la última semana de las vacaciones de verano, estadísticamente hay visitantes», detalló García.
Por esa razón, manifestó que junto con INDETUR, la Secretaría de Cultura y Cotelco, se realizará una promoción en Barranquilla, Cartagena y Valledupar para atraer visitantes ese fin de semana.
Esta semana se hizo el lanzamiento de las festividades marinas en la ciudad de Bogotá, con la participación de personalidades y artistas, con el objetivo de promocionarlas y lograr que más personas se motiven a visitar la capital del Magdalena durante los días de celebración.
