El hombre amenazó con accionar su arma de fuego contra los operarios si no se retiraban del lugar. Air-e pidió a las autoridades actuar contra el responsable.
En la mañana de este martes, operarios de la empresa de energía Air-e llegaron a un inmueble ubicado en el barrio El Prado para realizar la suspensión del servicio por una deuda de más de 10 millones de pesos. Sin embargo, lo que debía ser un procedimiento rutinario se convirtió en un momento de tensión extrema cuando el dueño de la vivienda los enfrentó con una escopeta.
Videos grabados por testigos y por los propios trabajadores muestran el instante en que el usuario sale de su vivienda con el arma de fuego en la mano y, con un tono agresivo, advierte a los operarios que no se atrevan a tocar el medidor ni a intentar cortar el servicio.
«Si tocan algo, la disparo», se escucha decir al hombre en las grabaciones, mientras apunta a los trabajadores. Pese a la amenaza, los operarios intentan dialogar con él, explicándole que solo cumplían con su deber, pero la tensión sigue escalando.
Los trabajadores, al verse en riesgo, decidieron retirarse del lugar, dejando en evidencia el peligro al que están expuestos en el cumplimiento de su labor.
Pronunciamiento de Air-e
Ante la gravedad de la situación, Edwin Palma Egea, agente especial de Air-e, rechazó el ataque y expresó su apoyo a los empleados afectados.
«Un usuario del barrio El Prado, de Santa Marta, que le adeuda servicios a Air-e por más de 10 millones de pesos, reacciona así con un arma de fuego ante un humilde trabajador que solo fue a cumplir su labor», manifestó Palma Egea a través de sus redes sociales.
Asimismo, el funcionario hizo un llamado a las autoridades para que investiguen el hecho y sancionen al responsable.
«Solicitamos a la Policía y la Fiscalía que tomen medidas y acompañen estas diligencias, ya que se encuentran enmarcadas en la ley. Mi solidaridad con el trabajador y mi rechazo enérgico a este acto de violencia extrema. Como empresa, procederemos conforme a la ley», añadió.
El caso ha generado indignación en la comunidad. Este no es el primer incidente de este tipo en la región. En varias ocasiones, trabajadores del sector han sido víctimas de amenazas, agresiones físicas e incluso secuestros por parte de usuarios que, al no estar de acuerdo con el cobro de sus facturas o el corte del servicio, recurren a la violencia.
Desde el sindicato de trabajadores de la empresa, se ha insistido en la necesidad de que las autoridades refuercen la seguridad en estas intervenciones y brinden garantías a los empleados.
Acciones legales contra el agresor
De acuerdo con lo anunciado por Air-e, la empresa ya está tomando medidas legales contra el usuario agresor.
Según el Código Penal colombiano, amenazar con un arma de fuego a una persona puede ser considerado como un delito de amenaza agravada, porte ilegal de armas o incluso tentativa de homicidio, dependiendo del análisis que realicen las autoridades.
Por ahora, se espera que la Policía y la Fiscalía avancen en la investigación y determinen las sanciones correspondientes.
