Una joven de 18 años fue rescatada de manera milagrosa tras quedar inconsciente en el mar luego de golpearse la cabeza. La rápida reacción de sus acompañantes y paramédicos le devolvió la vida. Permanece en clínica bajo pronóstico reservado.

La alegría de un paseo en Inca Inca casi se convierte en tragedia. En cuestión de segundos, la diversión dio paso al drama cuando Carmen Alicia Rodríguez Jaramillo, una joven de tan solo 18 años, quedó inconsciente en el mar tras golpearse la cabeza al lanzarse al agua.

El golpe la dejó sin conocimiento, lo que le impidió nadar y provocó que tragara una gran cantidad de agua. Sus acompañantes notaron que algo no estaba bien y no dudaron en lanzarse al rescate. Lograron sacarla del agua con ayuda de personal de salvavidas, y fue entonces cuando comenzó la carrera contra el tiempo.

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Sobre la orilla de El Rodadero, en medio de gritos, llanto y desesperación, paramédicos iniciaron maniobras de reanimación. Fueron minutos agónicos. Carmen no reaccionaba y el agua en sus pulmones no permitía que respirara por sí sola. Las escenas, grabadas por testigos con sus teléfonos celulares, reflejan la tensión del momento.

Pero hubo esperanza. La joven fue devuelta a la vida. Aún inconsciente, pero con signos vitales, fue trasladada de inmediato en ambulancia hasta una clínica de la ciudad, donde permanece internada bajo pronóstico reservado.

Los médicos informaron que aunque su estado es delicado, el hecho de haber recibido atención inmediata fue clave para evitar una tragedia. El mar, por poco, la arrebata. Pero la rapidez de los presentes y los equipos de emergencia hicieron la diferencia.

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Hoy su familia y amigos esperan su recuperación, agradecidos de que Carmen esté viva. Y en El Rodadero, el recuerdo de ese momento todavía estremece a quienes presenciaron la escena.