La familia de la madre alega retrasos en la atención médica que habrían derivado en la tragedia.
En la sala de su hogar, todavía con la mirada perdida y el dolor palpable en su voz, una madre en Fundación recuerda entre lágrimas el momento que debía haber sido de felicidad: recibir a su bebé en brazos. En cambio, el día que aguardaba con ilusión se convirtió en una pesadilla que la dejó devastada.
En lugar de una pequeña en sus brazos, el centro asistencial le entregó a su hija fallecida, envuelta en una caja de cartón. “No puedo entender cómo algo así puede ocurrir. Yo venía a dar vida y me entregaron la muerte”, expresa entre sollozos.
La denuncia contra el Hospital San Rafael de Fundación se ha vuelto un símbolo del reclamo de justicia y de indignación en la comunidad. Según la versión de los familiares, la madre llegó al hospital en trabajo de parto, con signos evidentes de que el alumbramiento era inminente. Sin embargo, afirman que, en lugar de brindarle la atención que urgía, la mantuvieron esperando varios días, mientras el tiempo parecía detenerse y su angustia crecía.
“Esperamos, aguantamos todo, porque confiábamos en que harían lo correcto. Pero los días pasaban y nada ocurría. Se suponía que el nacimiento iba a ser natural, pero al final decidieron que fuera cesárea. Nos dijeron que no había otra opción, y nos hicieron firmar casi a la fuerza”, relata la hermana de la madre, quien estuvo a su lado en esos momentos.
Los familiares aseguran que hubo una presión evidente para que aceptaran la cesárea, alegando que las consecuencias podrían ser peores si no aceptaban.
“Nos dijeron que si no firmábamos, iban a llamar a la policía. Nos hicieron sentir que estábamos en el lugar equivocado, pero al mismo tiempo, sabíamos que ya no había tiempo de ir a otro hospital. Nos sentimos atrapados”, narra uno de los parientes, visiblemente afectado.
El tiempo de espera para la intervención quirúrgica y la falta de respuestas oportunas, aseguran, llevaron al trágico desenlace. La familia sostiene que la bebé murió debido a la falta de oxígeno, y aunque aún no hay un reporte oficial que confirme esta versión, el dolor y la duda los consume.
La imagen de la caja de cartón en la que entregaron el cuerpo sin vida de la pequeña se ha convertido en un momento de dolor profundo.
“No es solo la muerte de mi hija lo que me duele, es la manera en que nos trataron, la forma en que nos la devolvieron. Mi bebé merecía respeto”, expresa la madre, quien ahora pide que se investigue a fondo el caso.
El Hospital San Rafael aún no ha emitido declaraciones sobre lo ocurrido. Mientras tanto, la Secretaría de Salud de Magdalena ha anunciado que abrirá una investigación para esclarecer los hechos y revisar los protocolos del hospital.
En Fundación, la indignación crece. Vecinos, familiares y personas de otros barrios se han unido al llamado de justicia de la madre, exigiendo que se llegue a la verdad y que se tomen medidas para evitar que otro niño o niña termine en una caja de cartón en lugar de en los brazos de su madre.
