El trabajador había terminado su jornada laboral y se dirigía a su casa cuando sicarios en moto lo interceptaron y lo derribaron a tiros.
José Aguilar Nadjar, presidente del sindicato del Hospital de Aracataca, Magdalena, fue asesinado mientras regresaba a su hogar tras culminar su turno como vigilante en dicho centro de salud.
Testigos del hecho señalaron que dos individuos interceptaron a Aguilar y le dispararon en repetidas ocasiones, provocando su muerte en el acto.
Las autoridades han comenzado las investigaciones correspondientes y, aunque aún no se descartan otras líneas de investigación, una de las hipótesis iniciales apunta a un posible asesinato vinculado con temas de corrupción.
Nidia Castañeda, presidenta del sindicato en el Magdalena, condenó el crimen, calificándolo como un ataque atroz contra un hombre que se destacó por su dedicación y trabajo en defensa de los derechos laborales.
Castañeda recordó que Aguilar había sido clave en la mejora de las condiciones de trabajo de sus compañeros, por lo que su muerte deja un vacío profundo en la comunidad sindical.
La Policía del Magdalena ha redoblado esfuerzos para esclarecer los motivos detrás del homicidio y capturar a los responsables.
Mientras tanto, el asesinato ha provocado una ola de indignación y tristeza entre los habitantes de Aracataca, quienes exigen justicia y celeridad en las investigaciones.
La comunidad permanece atenta al desarrollo de los acontecimientos, esperando que este crimen no quede impune y que las autoridades actúen con prontitud para esclarecer los hechos.