El aguacate una fruta muy consumida en Santa Marta; sin embargo por el alto valor que se consigue últimamente.
Camilo Mercado se gana la vida vendiendo frutas y legumbres en carretillas por la ciudad, pero desde hace varios días decidió no vender más aguacate, pues la gente no lo estaba comprando por sus elevados precios.
Este comportamiento se comenzó a ver desde hace semanas en la ciudad. Y los que aún se resisten han notado la disminución en las ventas de este fruto. “Está incomparable, ya es un lujo comerlo”, dice don Pacho, otro comerciante samario.
En todo el país se ha evidenciado un fuerte aumento en el valor del aguacate, tanto Hass como de la variedad Papelillo o Lorena.
De acuerdo con los datos del Sistema de Precios y Abastecimiento del Sector Agropecuario (Sipsa) del Dane, el aguacate Hass pasó de costar, en promedio, $ 3.679 el kilo en la última semana de marzo de 2024 a costar $ 6.329 en el mismo periodo de este año. Un aumento del 72 %.
Asimismo, el aguacate papelillo pasó de valer, en promedio, $ 7.225 el kilo a $ 11.583. Un incremento del 60 %.
Y el precio promedio del aguacate Hass pasó de $ 5.440 el kilo en la última semana de marzo de 2023, a $ 8.031 en el mismo periodo de este 2024. Esto significó un alza de 47 % en su valor.
Desde la Corporación de Productores y Exportadores de Aguacate Hass de Colombia (Corpohass) explicaron a este diario que actualmente hay una disminución en la oferta de la fruta, pues el fenómeno de El Niño creó un “bache” entre las cosechas.
Pedro Pablo Díaz, gerente de Jardín Exotics, empresa de gulupa y aguacate, también comentó a este diario que esta transición es la que ha provocado escasez de la fruta y, por ende, que los precios suban bastante. Pero, adicional a esto, la industria de pasta de aguacate (como guacamole) y de aceite está creciendo bastante en el país, por lo que están demandando más excedentes.