Taxistas aunque se benefician con aplicaciones, exigen que las prohíban en Santa Marta 

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El próximo 25 de julio la denominada mancha amarilla protestará contra el uso de Indriver en la ciudad y exigirán controles al mototaxismo. 

En Santa Marta, al igual que en otras ciudades de Colombia, el uso de aplicaciones para solicitar servicios de transporte se ha convertido en una tendencia en crecimiento. 

Los usuarios pueden optar por un vehículo particular de diversas gamas o un taxi tradicional. Este fenómeno ha impulsado a los taxistas de la ciudad a adoptar la tecnología, aunque la mayoría aún se muestra reacia a estos mecanismos electrónicos.

La inclusión de taxis en estas aplicaciones marca un avance hacia la modernización del servicio de transporte en la ciudad. No obstante, esta evolución no ha sido recibida con entusiasmo por todos.

La posición de los taxistas 

Muchos taxistas se oponen aún a la utilización de aplicaciones para solicitar vehículos, lo que ha llevado a la denominada «mancha amarilla» a organizar una jornada de protesta para el próximo 25 de julio. 

El objetivo de esta manifestación es exigir a las autoridades de movilidad una regulación estricta contra los vehículos particulares que prestan servicios de transporte público a través de plataformas digitales, así como contra el creciente fenómeno del mototaxismo.

Un vocero del gremio de taxistas, quien pidió mantener su anonimato por temor a represalias, expresó su preocupación por el impacto negativo de estas aplicaciones en el sector. Según el vocero, las aplicaciones han devaluado el valor de los trayectos, haciendo que sea imposible competir con vehículos particulares que no pagan impuestos.

“Nosotros, al estar legalmente constituidos, pagamos impuestos para prestar el servicio. Sin embargo, estos vehículos que se inscriben a las plataformas lo hacen sin estar autorizados ni regulados, ahorrándose así un recurso importante”, señaló el taxista.

El vocero también denunció el uso de los taxis para posicionar las plataformas en Santa Marta, mientras que de manera ilegal se vinculan automotores particulares que compiten deslealmente. “Nos descuentan un porcentaje muy alto de ese servicio devaluado y nosotros, como conductores, estamos asumiendo todos los costos de operación”, indicó.

La situación en Santa Marta refleja una problemática nacional, donde la modernización del transporte a través de aplicaciones digitales choca con los intereses y la subsistencia de los taxistas tradicionales. 

La jornada de protesta prevista busca que las autoridades tomen medidas contundentes para regular el uso de aplicaciones y garantizar una competencia justa en el sector del transporte público.