En un acto de desesperación y angustia, la familia de Diego Eduardo Mendoza Barros, de 19 años, se encadenó este viernes en la vía del tren, exigiendo una búsqueda efectiva del joven que desde el 19 de mayo fue raptado por hombres armados en la finca La Vega, situada entre San Javier y Palmor.
El rapto ocurrió el 19 de mayo de 2024, cuando un grupo de diez hombres armados y encapuchados irrumpió en la finca La Vega, llevándose a Diego junto a otras tres personas.
Freddy Polo, uno de los secuestrados, fue hallado muerto días después, incrementando la desesperación y el miedo en la familia Mendoza Barros, quienes no han tenido noticias del paradero de Diego desde entonces.
Pese a las denuncias y la presión ejercida a través de protestas, la familia de Diego ha denunciado la inacción de las autoridades en la búsqueda del joven.
Han expresado su angustia por la falta de respuestas efectivas, a pesar de que la administración municipal anunció una recompensa de hasta 5 millones de pesos por información que permita localizar a Diego.
Este viernes, en un intento por atraer la atención de los medios y de las autoridades, la familia de Diego se encadenó en la vía del tren. “Estamos desesperados. Nadie nos da respuestas. No sabemos si está vivo o muerto”, expresó entre lágrimas su madre.
La comunidad local ha mostrado su solidaridad y apoyo a la familia, y la línea directa 3232732153 sigue activa para recibir información con absoluta confidencialidad. Las autoridades hacen un llamado a la colaboración ciudadana, señalando que cualquier dato puede ser crucial para resolver este caso y llevar tranquilidad a la familia Mendoza Barros.
La familia pide a los medios de comunicación que difundan su clamor, con la esperanza de que se intensifique la búsqueda y se esclarezca el paradero de Diego Eduardo Mendoza Barros.
