Operativo a fondo en el Centro Histórico: la Alcaldía enfrenta el desorden, el microtráfico y la instrumentalización de menores
En vísperas de la temporada comercial más importante del año, el Distrito desplegó un operativo integral para recuperar el orden en el corazón económico de Santa Marta. Vendedores informales, menores instrumentalizados y expendios de droga mantienen en tensión a comerciantes y autoridades.
El Centro Histórico de Santa Marta, especialmente su zona comercial, volvió a encender las alarmas. Lo que parecía controlado tras años de recuperación del espacio público, regresó con fuerza: ventas ambulantes nuevas cada día, calles tomadas y un desorden que los comerciantes aseguran “había vuelto a niveles de hace tiempo atrás”.
La carrera Quinta y sus alrededores —arterias clave del movimiento comercial— empezaron nuevamente a llenarse de carretas, exhibiciones improvisadas y vendedores estacionarios que, en cuestión de semanas, ocuparon las mismas zonas que ya habían sido despejadas.
Pero detrás de ese desorden físico apareció un problema más grave.
Menores instrumentalizados: del rebusque a las redes del microtráfico
Las autoridades recibieron reportes constantes de comerciantes: menores de edad, algunos provenientes de barrios periféricos, estaban siendo pagados para atraer clientes a los locales y hacer labores de “jaladores”.
Sin embargo, la situación escaló peligrosamente. Las denuncias indicaban que varios de estos niños y adolescentes ahora eran utilizados por bandas dedicadas al expendio de sustancias psicoactivas en pleno Centro Histórico.
La calle 19, entre carreras cuarta y sexta, fue señalada específicamente como un punto crítico: desorden en el espacio público, consumo a la vista de todos y venta de droga que se mezclaba con la actividad comercial.
La intervención: Policía, Ejército, ICBF y Espacio Público entran en acción
Ante la presión de comerciantes y residentes, la Alcaldía —liderada por Carlos Pinedo— ejecutó un operativo integral. En la intervención participaron la Secretaría de Gobierno, Seguridad, Espacio Público, Policía Metropolitana, Ejército, Personería y el ICBF.
El objetivo: recuperar la movilidad, frenar el uso de menores en actividades ilegales, evitar el consumo de drogas en la zona y retomar el control de los espacios que habían vuelto a ser ocupados irregularmente.
En medio del operativo, según reportó la Administración, un funcionario de Vigías del Espacio Público fue golpeado y agredido por un grupo de más de 20 jóvenes que intentó impedir la intervención. El hecho será denunciado penalmente.
La Alcaldía insistió en que en ningún momento se ejerció violencia contra ciudadanos y que cualquier señalamiento será investigado bajo los protocolos institucionales.
Choque con los informales y cierres temporales de negocios
El operativo dejó reacciones divididas. Mientras comerciantes celebraron la presencia de la autoridad, un sector de vendedores informales expresó molestia y denunció excesos, versión que la Alcaldía niega tajantemente.
Durante la jornada:
- Se cerraron temporalmente 6 establecimientos por incumplir requisitos de ley.
- Se retiraron ventas irregulares.
- Se controló el tránsito de motos en zonas prohibidas.
- Se intervinieron puntos señalados por expendio de droga.
- Se verificó la presencia de menores posiblemente instrumentalizados.
El Distrito advirtió que las intervenciones continuarán semanalmente y que no habrá marcha atrás en los controles.
La postura del Distrito: “Imponer la ley cuesta, pero no vamos a ceder”
El secretario de Gobierno, Camilo George, ofreció unas palabras tras los incidentes:
“Imponer la ley cuesta, pesa y crea enemigos, pero vale la pena intentarlo una y mil veces. Anoche nos agredieron, intentaron tumbarnos, pero hoy estamos más fuertes y no vamos a ceder un solo milímetro”.
El funcionario reiteró que la intervención no es una acción contra el vendedor ambulante sino contra las mafias, el desorden y la instrumentalización de menores. También envió un mensaje de respaldo a los equipos de Vigías de Espacio Público: “Nadie los puede tocar. Son ejemplo de imponer la ley”.
Un pulso por el orden en una temporada clave
Con diciembre a la vuelta de la esquina, el Centro Histórico se prepara para una de sus temporadas comerciales más importantes. La tensión entre autoridad, vendedores informales y comerciantes seguirá marcando la agenda local en los próximos días.
La administración de Carlos Pinedo anunció que estas acciones forman parte de una estrategia que será constante, progresiva y sostenida.
“Santa Marta merece respeto, tranquilidad y autoridad”, concluyó el secretario de Gobierno.
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