El joven de 25 años, fue asesinado dentro de su vivienda en el barrio San Jorge, municipio de El Difícil, Magdalena. Según versiones, el ataque iba dirigido contra su compañera sentimental, quien había salido minutos antes del lugar.

Un nuevo hecho de sangre sacudió al municipio de El Difícil, en el Magdalena. Pedro Luis Ortega Linero, de apenas 25 años, fue asesinado dentro de su vivienda en el barrio San Jorge, en un ataque que, según las primeras versiones, no estaba dirigido a él.

Eran cerca del mediodía cuando dos hombres en motocicleta se detuvieron frente a la casa de Ortega Linero. Sin titubeos, los sicarios ingresaron al inmueble preguntando por una mujer. Pero ella no estaba. Había salido minutos antes. En su lugar, se encontraron con Pedro Luis, quien —según testigos— los encaró al darse cuenta de lo que buscaban.

Esa reacción le costó la vida. Los hombres le dispararon en repetidas ocasiones y huyeron del sitio a toda velocidad, dejando tras de sí el grito desesperado de los vecinos que corrieron a auxiliarlo. No hubo tiempo para nada: Ortega Linero quedó en el acto, sentado en la misma sala donde acostumbraba recibir a sus amigos.

Posteriormente fue llevado a un centro asistencial donde pese al esfuerzo de los médicos dejó de existir.

La escena generó pánico en todo el sector.

“Eso fue rapidito, se escucharon los tiros y cuando salimos ya el pelado estaba sin vida”, relató una vecina del barrio.

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La Policía y el CTI de la Fiscalía asumieron la investigación. Las autoridades manejan la hipótesis de que el ataque iba dirigido contra su pareja, aunque no descartan otras líneas relacionadas con posibles retaliaciones. Una fuente judicial confirmó que Ortega Linero había sido capturado en abril del año pasado por tráfico de estupefacientes, pero no se ha determinado si ese antecedente guarda relación con su homicidio.