La muerte de Ghilson Caicedo Ángulo durante un procedimiento policial en Medellín desató la indignación de su familia y vecinos, que aseguran que el joven no era un delincuente, sino que atravesaba una crisis nerviosa. La Policía sostiene que actuó en legítima defensa.

Ghilson Caicedo Ángulo, de 28 años, murió de un disparo durante un operativo policial en el barrio Los Tanques, en Medellín. En videos ciudadanos se observa al joven sosteniendo un cuchillo y caminando hacia un uniformado antes de caer herido.

“Mi hijo no era malo, fue víctima de un abuso policial”, dijo entre lágrimas su madre, mientras exigía justicia y una investigación independiente. La familia asegura que Ghilson pasaba por un momento difícil, pero que no representaba una amenaza real.

“Solo tenía los nervios alterados y ese policía abusó de su autoridad”, agregó.

Vecinos del sector afirman que varios intentaron mediar antes del disparo, pero que el procedimiento se tornó confuso. Algunos aseguran que el joven sostenía el arma blanca, aunque nunca se acercó lo suficiente como para justificar un tiro letal.

Lo que dice la Policía

Desde la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá informaron que los uniformados acudieron al sitio tras un llamado por una riña doméstica. Según su reporte, el joven estaba bajo los efectos del alcohol y trató de agredir a los agentes, lo que obligó a uno de ellos a usar su arma de dotación en defensa propia.

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El caso está en manos de la Inspección General de la Policía y la Fiscalía, que analizan los videos para determinar responsabilidades en el hecho.