La jornada del 31 de octubre, que debía ser de disfraces y fiesta, terminó teñida de sangre en Santa Marta. Tres personas fueron asesinadas en distintos puntos de la ciudad. La última víctima fue un joven conocido como “El Indio”, atacado a tiros cuando regresaba a casa.

El 31 de octubre en Santa Marta tuvo una jornada violenta con tres homicidios en menos de 24 horas. El último, ocurrido pasada las 11 de la noche en el barrio El Pantano, donde murió Kevin José Forero, un muchacho de apenas 18 años al que todos conocían como El Indio.

Según versiones de testigos, Kevin había estado en una fiesta en el sector del Oasis, donde sostuvo una acalorada discusión con otras personas. Aunque la tensión subió de tono, decidió dar por terminada la pelea y marcharse del lugar. “No quería problemas”, contó un allegado. Pero cuando tomó rumbo hacia su casa, la muerte lo estaba esperando.

En una calle destapada del barrio El Pantano, dos hombres en motocicleta se le acercaron y le dispararon sin piedad. Los vecinos escucharon los tiros, pero poco pudieron hacer. El joven cayó al suelo, sin vida, en medio de la oscuridad y el ruido lejano de una noche que debía ser de fiesta.

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Su madre, al enterarse de la noticia, corrió hasta el lugar. Lo vio tendido sobre el pavimento y se abalanzó sobre su cuerpo. Lo abrazó fuerte, con un llanto que partía el alma, mientras miraba al cielo sin poder creer lo que estaba viendo. Así terminó el día más violento de octubre: una madre destrozada y una ciudad que volvió a dormir con un nuevo joven asesinado.