Dos balaceras en menos de una semana tienen en alerta a los habitantes de María Eugenia. La más reciente dejó muerto a un joven que, según versiones, estuvo involucrado en una riña previa. Las autoridades investigan si los hechos están relacionados.

En María Eugenia la calma volvió a romperse a tiros. En menos de una semana, los vecinos han tenido que tirarse al suelo dos veces para protegerse de las balas. Primero fue un herido; ahora, un muerto. Ambos casos —según se comenta en las esquinas— estarían conectados.

El martes pasado, una riña en una tienda-estadero terminó con un joven herido de bala. Víctor Suárez, quien según testigos estaba grabando la pelea con su celular, recibió un disparo en el abdomen y fue llevado a una clínica, donde aún sigue internado.

Apenas tres días después, la violencia volvió al mismo punto. Esta vez el blanco fue Royman René Meléndez, un joven residente del barrio, quien se desplazaba en una motocicleta tipo NMax por la intersección de la calle 43 con carrera 13. Eran cerca de las tres de la tarde cuando un hombre armado se le acercó y sin decir palabra lo atacó a tiros.

El sicario disparó al menos siete veces. Cuatro de esas balas impactaron el cuerpo de Royman, que cayó al pavimento. Su padre presenció impotente la escena. Aunque intentaron llevarlo a un centro asistencial, los médicos no pudieron salvarle la vida.

Los habitantes del sector quedaron paralizados por el miedo. Muchos conocían a Royman, lo veían pasar a diario, y ahora temen que el crimen sea solo el comienzo de una nueva racha de violencia.

“Esto parecía tranquilo otra vez, pero todo volvió a lo mismo. Ya uno no sabe quién sigue”, dijo una vecina.

La Policía Metropolitana llegó poco después, acordonó la zona y recolectó evidencia balística. Los investigadores no descartan que el ataque esté relacionado con la riña del martes, el mismo hecho en el que resultó herido Suárez. Sin embargo, las causas reales aún no se han esclarecido.

El doble episodio ha encendido las alarmas en María Eugenia, un barrio que hace algunos meses era punto crítico de enfrentamientos y que hoy parece revivir esa historia. En menos de siete días, dos tiroteos, un herido grave y un joven asesinado resumen el temor que se respira otra vez en sus calles.

Lea aquí: Familia exige claridad y responsabilidades por muerte de joven en reto de discoteca

Lo cierto es que la tranquilidad de María Eugenia volvió a ser una víctima más. Y mientras las autoridades prometen resultados, los vecinos solo esperan que esta vez no se repita el ciclo de sangre que creían superado.