
Un niño de un año murió tras atragantarse con una canica en Ciénaga
Vecinos aseguran que el menor sufría constantes episodios de violencia en casa; autoridades investigan si su muerte pudo evitarse.
El corregimiento de Cordobita, en la zona rural de Ciénaga, Magdalena, quedó paralizado tras conocerse la muerte de un niño de apenas un año.
Según las primeras versiones, el menor se atragantó con una canica —conocida popularmente como “bolita de uñita”— mientras jugaba en su vivienda.
De acuerdo con testigos, la madre intentó socorrerlo de inmediato, pero la situación se salió de control. El pequeño dejó de respirar en cuestión de segundos y murió en sus brazos antes de que lograra ser trasladado a un centro asistencial. “Fue desgarrador escuchar los gritos, pero ya no reaccionaba”, contó un vecino, aún conmovido por la escena.
El niño sería objeto de maltratos
La tragedia, sin embargo, no se ha quedado solo en el lamento. En el caserío comenzaron a circular testimonios que apuntan a un trasfondo más oscuro: presuntos episodios de maltrato que el niño habría sufrido en su propio hogar. Habitantes relataron que en distintas ocasiones escucharon llantos prolongados y discusiones fuertes en la vivienda, hechos que ahora alimentan las sospechas sobre las condiciones en las que crecía el menor.
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A la consternación se suma un detalle que avivó la incertidumbre: días después del fallecimiento, la comunidad desconoce el paradero del cuerpo y no se ha realizado ninguna ceremonia fúnebre. “No sabemos dónde está ni qué van a hacer con él. Todo es un misterio”, dijo un habitante que pidió anonimato por temor a represalias.
La Secretaría de Gobierno de Ciénaga, en conjunto con la Policía y organismos de infancia y adolescencia, confirmó que abrió una investigación para esclarecer las causas de la muerte y determinar si hubo negligencia o violencia intrafamiliar detrás del caso. “No podemos permitir que hechos como este queden impunes. Si hubo maltrato, debe ser sancionado”, advirtió un líder comunal.
Mientras tanto, el corregimiento entero permanece sumido en una mezcla de dolor y desconfianza, esperando respuestas que expliquen si lo ocurrido fue un accidente o una tragedia que pudo haberse evitado.
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