Once reclusos participaron en la campaña “Buena Esa”, desarrollada en el Asilo Sagrado Corazón de Jesús y María, donde realizaron labores de mantenimiento y compartieron momentos de compañía con los adultos mayores, en el marco de sus procesos de resocialización.

En un gesto que busca transformar realidades y tender puentes con la comunidad, 11 internos de la cárcel Rodrigo de Bastidas, en Santa Marta, se sumaron a la campaña “Buena Esa”, una iniciativa que tuvo como escenario el Asilo Sagrado Corazón de Jesús y María.

La jornada no se limitó a labores físicas, sino que también fue un espacio de encuentro humano. Los reclusos se dedicaron a pintar las fachadas, realizar limpieza y apoyar en el mantenimiento de las instalaciones, contribuyendo así al embellecimiento del lugar. Sin embargo, lo más significativo fue la cercanía que lograron con los adultos mayores, quienes recibieron de ellos compañía y gestos de afecto.

La jornada estuvo bajo la supervisión del personal administrativo del penal y de los miembros del Cuerpo de Custodia y Vigilancia, quienes garantizaron la logística y el normal desarrollo de cada actividad. Su presencia permitió que la campaña se desarrollara de manera ordenada y en un clima de respeto mutuo.

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Los internos que hicieron parte de la jornada pertenecen a un grupo seleccionado por su buen comportamiento y avances en programas de resocialización. Gracias a ello, tienen la posibilidad de involucrarse en actividades comunitarias, mientras combinan sus estudios y trabajos dentro del penal con acciones sociales que fortalecen su proceso de reintegración y el aprendizaje de valores de convivencia.