Oplus_16908288

ACSN impone su propia justicia: obligaron a joven a confesar robo de motos y de supermercado en Santa Marta


El hombre, al parecer menor de edad, en medio de su confesión agradece al grupo armado por no matarlo y darle una nueva oportunidad.

Un nuevo caso de “confesión forzada” sacude a Santa Marta. En redes sociales circula un video en el que un joven —cuyo nombre aún no ha sido confirmado por las autoridades— admite haber cometido varios robos de motos en distintos barrios de la ciudad, entre ellos San Jorge y Pescaito.

Su relato, nervioso y entrecortado, ha causado conmoción no solo por el tono arrepentido con el que se dirige a la cámara, sino porque agradece a las Autodefensas Conquistadores de la Sierra Nevada (ACSN) por perdonarle la vida.

“Las Autodefensas Conquistadoras de la Sierra me perdonaron la vida por robarme cuatro motos, dos en el callejón de San Jorge y dos en Pescaito. Y hace tres días me robé otra en Pescaito y se la vendí al señor Juan de San Martín, que vive por el parquecito. Mis acompañantes eran Roniel y Fayu de Taganga”, dice el joven en uno de los apartes de la grabación.

El muchacho también reconoce que participó en un hurto a un supermercado de cadena. “Me metí en el D1 y me robé unos productos, pero las Autodefensas Conquistadoras de la Sierra me los quitaron y los devolvieron”, agrega con voz temblorosa, antes de identificarse como habitante de Pescaito. Finalmente, advierte que si vuelve a delinquir “me darán Indumil”, expresión que los internautas interpretan como una amenaza de muerte.

La justicia en manos de grupos ilegales
Este tipo de exposiciones no son nuevas. Hace pocos meses se registraron casos similares en Riohacha, y ahora la práctica parece repetirse en la capital del Magdalena. Para analistas, estos videos evidencian la manera en que las ACSN han asumido un rol de autoridad en algunas zonas, imponiendo su propia forma de justicia y control social.

La situación genera un grave dilema: mientras el grupo armado se posiciona como “regulador del orden”, las instituciones oficiales mantienen silencio. Hasta el momento, la Policía y la Fiscalía no han emitido un pronunciamiento claro sobre la autenticidad del video ni sobre las posibles investigaciones en curso.

El impacto de la confesión se ha multiplicado en redes sociales, donde los internautas se dividen entre quienes piden cárcel y quienes creen que el muchacho merece una segunda oportunidad.

“Está claro que robó, pero si de verdad se arrepiente debe recibir ayuda, no una bala”, escribió un usuario en Facebook. En contraste, otro habitante de Pescaito afirmó: “No puede quedar en palabras, hay víctimas que esperan justicia”.


¿Quieres pautar

con nosotros?