El colombiano recibió heridas mortales en Estados Unidos en medio de una discusión con su pareja sentimental de nacionalidad venezolana. El caso dio un giro inesperado: ella asegura que actuó en defensa propia y enfrenta un proceso judicial.

El sueño que llevó a Breiner Pérez Matute a dejar su natal barrio La María en Cartagena para probar fortuna en Estados Unidos terminó de la peor manera. El pasado sábado 12 de septiembre, el joven de 20 años perdió la vida tras recibir varias puñaladas en el tórax durante una violenta confrontación con su pareja, Mirla González, de 31 años.

Breiner había emigrado hace dos años junto a su hermano y Mirla, con la ilusión de trabajar y enviar dinero a su madre en Cartagena. Sin embargo, desde el inicio, la relación fue motivo de tensiones familiares: la diferencia de edad y el carácter dominante de la mujer despertaban dudas sobre el futuro de la pareja.

El sábado, Breiner viajó desde Chicago hasta Indianápolis para reencontrarse con su hermano y algunos amigos. Lo que debía ser un encuentro de celebración terminó en tragedia. Según la primera versión de los familiares, una escena de celos desató una discusión que terminó con Mirla hiriéndolo mortalmente con un cuchillo. Aunque lo trasladó a un hospital cercano, los médicos confirmaron su muerte.

El giro del caso

Cuando todo apuntaba a un homicidio pasional, un video publicado por el portal Cartagena Caliente cambió el rumbo de la investigación. En las imágenes se observa a Breiner agrediendo física y verbalmente a Mirla dentro de la vivienda que compartían en Indianápolis, en la cuadra 300 de North Shortridge Road.

La defensa de la mujer asegura que actuó en legítima defensa, pues habría sido víctima de constantes maltratos y que el día del ataque solo intentó proteger su vida y la de sus dos hijos.

Peleas frecuentes y testigos incómodos
Vecinos del sector confirmaron que los enfrentamientos eran parte del día a día de la pareja. “Escuchábamos gritos y golpes casi a diario; en varias ocasiones intentamos intervenir para que se calmaran”, dijeron a medios locales.

Pese a la aparición de este nuevo material probatorio, Mirla González permanece detenida y deberá comparecer ante un tribunal el próximo martes a las 9:15 a. m., donde se definirá si podrá defenderse en libertad o seguirá bajo custodia mientras avanza el proceso.

En Cartagena, la noticia ha causado un profundo impacto. Los amigos de Breiner lo describen como un joven trabajador que soñaba con regresar algún día para ayudar a su madre y darle un mejor futuro a su familia.

Hoy, su familia enfrenta un nuevo calvario: la repatriación del cuerpo desde Estados Unidos, un trámite que cuesta cerca de 12 mil dólares, más de 45 millones de pesos colombianos. Ante la magnitud de la suma, han pedido apoyo a la comunidad y a las autoridades para poder darle sepultura en su tierra natal.