Un video de seguridad en el que se ve a la víctima arrastrada por el cabello y desnuda en unas escaleras fue la prueba clave para capturar al presunto agresor.

La justicia alcanzó a Stevan Riascos Hernández, de 25 años, señalado de protagonizar uno de los casos de violencia de género más indignantes de los últimos meses.

El hombre fue detenido en el barrio Popular de Tuluá, Valle del Cauca, acusado de golpear, amenazar y abusar sexualmente de una joven de 20 años, identificada como Xiomara, en el corregimiento de Cisneros, Buenaventura.

Según las autoridades, Riascos habría llevado a la víctima a un motel, donde durante varias horas la sometió a agresiones físicas y sexuales. La brutalidad del ataque dejó lesiones graves y profundas secuelas emocionales, por lo que la joven permanece bajo atención médica y acompañamiento psicológico especializado.

El video que estremeció al país

El caso tomó relevancia nacional después de que se difundieran en redes sociales las imágenes captadas por una cámara de seguridad del establecimiento. En el video se observa a Xiomara desnuda, desorientada y siendo arrastrada por el cabello por el presunto agresor por unas escaleras.

La crudeza de las imágenes desató una ola de indignación y multiplicó las voces que exigían una respuesta inmediata de la justicia.

Organizaciones de derechos humanos y colectivos feministas pidieron que el caso fuera priorizado y tratado como un ejemplo de la magnitud de la violencia contra las mujeres en Colombia.

Judicialización y pedido de justicia

La Fiscalía imputará a Riascos delitos de violencia sexual, violencia intrafamiliar y lesiones personales agravadas, y solicitará que se le imponga medida de aseguramiento intramural.

Mientras el proceso avanza, la familia de Xiomara ha pedido respeto por su intimidad y apoyo para su recuperación integral. Entre tanto, las autoridades insisten en que la investigación se tramitará con celeridad, respaldada por la evidencia que, esta vez, dejó al agresor sin margen para escapar de la ley.