Un muerto y un herido dejó ataque en el barrio La Esperanza, en Cartagena. Las autoridades manejan como principal hipótesis un acto de venganza: el atacante sería el padre de una menor asesinada hace cuatro años, quien habría confundido al responsable y terminó matando a un inocente.

Jhon Pérez Flórez murió en el lugar equivocado, a la hora equivocada y por una bala que no era para él. Fue asesinado mientras hacía su trabajo como cobradiario en el barrio La Esperanza, en Cartagena. Su compañero, quien lo acompañaba en la jornada, recibió un disparo y sobrevivió. Todo indica que ese era el blanco real del ataque.

El crimen ocurrió en plena tarde, cuando los dos cobradores llegaron a una vivienda del sector para realizar el cobro habitual. Mientras Jhon esperaba ser atendido, un hombre en moto se acercó, desenfundó un arma y disparó directamente. Jhon murió en el acto. El otro cobrador, unos pasos detrás, fue alcanzado por una bala y trasladado a un hospital, donde permanece bajo custodia policial.

La primera hipótesis apuntó a un intento de robo, pero rápidamente fue descartada. Los investigadores empezaron a recibir testimonios de vecinos que abrieron otra línea de investigación: una posible venganza por un crimen ocurrido hace cuatro años.

Según los testimonios, el cobrador herido fue señalado en su momento como sospechoso del asesinato de una menor en ese mismo barrio, un caso que quedó sin esclarecer. El padre de la víctima habría jurado hacer justicia por su cuenta. Ese día, convencido de haber encontrado al responsable, habría ejecutado el ataque. Pero se equivocó, y mató a quien no tenía nada que ver.

La Policía Metropolitana de Cartagena investiga el caso como un posible acto de venganza. Aunque no hay capturas, analizan cámaras de seguridad, antecedentes de los involucrados y declaraciones clave. Todo apunta a que el autor del ataque sería el padre de la niña asesinada en 2021.

El cobrador herido, que logró sobrevivir, se convierte ahora en una pieza clave para esclarecer el crimen. Las autoridades buscan confirmar si el atentado fue planeado como una represalia y si el asesino disparó con la intención clara de saldar una deuda pendiente con su pasado.