El dueño de una vivienda fue agredido por los cobradores violentos que buscaban a una antigua inquilina. Aunque la Policía llegó al lugar, no hubo capturas.

“Llegaron gritando, rompieron la puerta y comenzaron a tirar todo al piso. Lo peor es que yo no les debo ni un peso”. Así comienza el testimonio de un habitante de Gaira, en Santa Marta, quien fue víctima del actuar violento de prestamistas conocidos como ‘gota a gota’.

Los cobradores, al parecer, buscaban a una mujer que había vivido antes en su casa, pero se equivocaron y arremetieron contra alguien que nada tenía que ver con la deuda.

El hecho ocurrió en plena mañana, cuando al menos dos hombres ingresaron de forma abrupta a la vivienda, causando daños materiales y dejando un ambiente de miedo entre los vecinos.

Sin mediar palabra, rompieron la puerta principal y lanzaron objetos al suelo, en un claro acto de intimidación que afectó al dueño actual del inmueble.

“Ellos debieron averiguar antes de actuar así. Aquí ya no vive esa señora. Yo compré esta casa hace unos meses y no tengo nada que ver con sus problemas”, reclamó con impotencia la víctima.

La rápida intervención de la comunidad permitió que la Policía llegara al sitio. Sin embargo, los uniformados no pudieron realizar ninguna captura debido a que el afectado no había interpuesto una denuncia formal. “Ahora, ¿quién responde por los daños?”, se pregunta el hombre, frustrado por la falta de respaldo de las autoridades.