El domingo, dos sectores de la ciudad se vieron afectados por cierres de vías debido a protestas de usuarios molestos que exigían soluciones al prolongado corte de energía que experimentaron durante el fin de semana.
Uno de los bloqueos se produjo en la troncal del Caribe, a la altura del barrio Santa Ana, donde los vehículos se vieron impedidos de pasar debido a neumáticos incendiados en la vía.
Otra protesta, que incluso se salió de control, tuvo lugar en el sector del Cisne, donde la comunidad insistía en que no permitirían que nadie entrara o saliera de la zona hasta que se restableciera el servicio de energía.
A pesar de que esta es la única vía de acceso al corregimiento de Minca y a varias urbanizaciones, no hubo autoridad presente que pudiera persuadir a los manifestantes para que retiraran el bloqueo.
Con el paso de las horas y sin solución a la vista, los ánimos se caldearon, y al llegar una cuadrilla de la empresa Air-e sin ofrecer una solución inmediata, los manifestantes atacaron a los empleados y su vehículo.
El vehículo fue saqueado y posteriormente incendiado con gasolina. Es indignante que la Policía no haya intervenido para evitar estos actos vandálicos, que además pusieron en peligro la vida de los trabajadores y de las personas presentes en la zona.
Como resultado de la actitud violenta de los manifestantes, la empresa Air-e decidió no enviar más equipos para reparar los daños, dejando a los residentes sin luz durante la noche
