Le pidieron divorcio y demandó a la esposa para que le devolviera riñón que le donó


El cirujano le reclama el órgano que le dio en 2001 a su esposa, tras descubrir que le fue infiel

Esta es la historia de Richard Batista, un médico de Nueva York quien donó un riñón a su esposa Dominic Barbara en 2001 y ahora exige una indemnización estimada en 1,5 millones de dólares.

En declaraciones públicas, Batista explicó que los problemas en su matrimonio surgieron debido a la enfermedad de Dominic, pero luego del trasplante, ella decidió divorciarse porque había comenzado una relación con su fisioterapeuta.

En 2005, cuando Dominic solicitó el divorcio, Richard demandó el regreso de su riñón o una compensación de 1,5 millones de dólares como parte del acuerdo, lo que desató una controversia legal.

Dominic negó las acusaciones de infidelidad, alegando que su relación con el fisioterapeuta era únicamente amistosa.

Por su parte, la Corte Suprema del Condado de Nassau rechazó la demanda de Richard, argumentando que el riñón donado no era un bien de propiedad para ser reclamado en un divorcio.

Los especialistas en ética médica coincidieron en que el caso no tiene futuro. Arthur Caplan, del Centro de Bioética de la Universidad de Pensilvania, lo calificó como «algo completamente imposible».
Luego Robert Veatch, especialista en ética médica del Instituto Kennedy de Ética de la Universidad de Georgetown, afirmó que «es ilegal intercambiar un órgano por algo de valor».

En Estados Unidos, los órganos no se pueden comprar ni vender. Donar un órgano es un regalo y legalmente, «cuando das algo, no puedes recuperarlo».


¿Quieres pautar

con nosotros?